El croata Marin Cilic, reciente campeón del Abierto de Estados Unidos de tenis, fue recibido como un héroe por varios miles de personas este martes en Medjugorje, su pueblo natal, situado en Bosnia, publicó la prensa local.

Cilic llegó a Medjugorje en un coche antiguo descapotable, saludó a sus vecinos, alineados a ambos lados de la calle, y se dirigió después a la iglesia local para rezar, según la televisión nacional bosnia (BHRT).

"¡Es milagroso!", dijo a la prensa antes de entrar a la iglesia de este pueblo, conocido mundialmente por otro milagro, el de las presuntas apariciones de la Virgen, motivo por el cual es lugar de peregrinación y atrae a más de un millón de fieles al año.

Cilic asistió luego con su familia a una misa celebrada en el exterior de la iglesia. "Doy las gracias a todos los que habéis venido y a otros que me han apoyado todos estos años", declaró.

"Gracias a mis padres, sin los cuales nunca hubiera triunfado. Y gracias a Dios y a la Virgen María, que me mostraron el camino y que me han hecho este regalo", dijo el número 9 del tenis mundial.

Su madre Koviljka y su padre Zdenko se mostraron muy emocionados por el recibimiento que le fue reservado a su hijo.

Cilic es un croata de Bosnia, país vecino a Croacia y donde un 10% de los 3,8 millones de habitantes son croatas.