La Microbiota: El Aliado Invisible de la Salud Gastrointestinal
¿Sabes lo que es la microbiota? Pues Esteban Ortiz, médico e investigador de la Universidad de las Américas (UDLA), explica la relevancia de este conjunto de microorganismos, presente no solo en el sistema gastrointestinal, sino también en la piel y las mucosas; juega un rol crucial en el equilibrio del cuerpo humano.
“Cada persona tiene una microbiota única, influenciada por factores como la dieta, el entorno cultural y la región donde vive. Es una biodiversidad microscópica que cumple funciones metabólicas, hormonales y de defensa”, afirma Ortiz.
Impacto del Estrés y Hábitos en la Microbiota
El especialista destaca que el estrés es uno de los factores que puede desequilibrar la microbiota. “El estrés, junto con infecciones o una mala alimentación, puede reducir la población de bacterias buenas en el intestino, lo que lleva a problemas como hinchazón, diarrea, estreñimiento y una mala absorción de nutrientes esenciales como vitaminas y minerales”.
Además, Ortiz menciona que estudios recientes han encontrado conexiones entre la microbiota y la salud mental. Desequilibrios en estos microorganismos pueden relacionarse con trastornos como ansiedad y depresión, debido a la influencia que tienen en la producción de hormonas y enzimas claves para el bienestar general.
Cómo Mantener una Microbiota Saludable
Para preservar la salud de la microbiota, Ortiz recomienda consumir alimentos ricos en probióticos, como el yogur, el kéfir y quesos de alta fermentación, que contienen bacterias beneficiosas como los lactobacilos. Estos microorganismos ayudan a mejorar la digestión, fortalecer el sistema inmunológico y combatir bacterias dañinas como el Helicobacter pylori, asociada con el cáncer gástrico.
“La clave está en mantener una dieta balanceada y rica en productos que favorezcan el equilibrio de la microbiota. Además, en casos específicos, los médicos pueden prescribir suplementos probióticos en forma de líquidos o ampollas”, agrega Ortiz.
Síntomas de Alarma
Entre los signos que podrían indicar un desequilibrio en la microbiota, Ortiz menciona:
- Hinchazón y gases.
- Diarrea o estreñimiento persistente.
- Sensación de acidez o empacho.
- Boca amarga o sensación de quemazón (pirosis).
Estos síntomas, explica, no son irreversibles y pueden tratarse con cambios en la dieta, probióticos y, en algunos casos, atención médica.
El Rol de la Prevención
“Hoy en día, no se trata solo de medicamentos, sino de mantener el equilibrio a través de hábitos saludables”, concluye Ortiz, subrayando la importancia de una microbiota fuerte y diversa como base para una vida saludable.
El llamado es claro: cuidar la microbiota es cuidar la salud integral, desde el sistema digestivo hasta el bienestar mental.
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