El director de fotografía John Bailey es el nuevo presidente de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas. La junta de gobernadores de la organización eligió a Bailey para un período de un año, en sucesión de Cheryl Boone Isaacs, quien ocupó el cargo desde el 2013.

Boone Isaacs se convirtió en una representante muy visible de la organización durante su presidencia, que incluyó el escándalo de #OscarsSoWhite (#OscarTanBlanco) y el error al anunciarse el premio a la mejor película este año. Hace unos meses dijo que no buscaría la reelección.

Los créditos de Bailey incluyen American Gigolo (Gigoló americano), The Big Chill (Reencuentro), Groundhog Day (Hechizo del tiempo) y As Good as It Gets (Mejor... Imposible). Ha sido gobernador de la academia en representación del ramo de la cinematografía durante 14 años.

El presidente de la Academia de cine tradicionalmente aparece en la gala de los premios Óscar. La ceremonia del próximo año será la 90ª.

La presidenta saliente fue la primera afroamericana en ocupar el cargo y la tercera mujer en presidir la Academia de Hollywood después de que lo hiciera en 1941 la legendaria actriz Bette Davis en 1941 y la guionista Fay Kanin, que fue presidenta entre 1979 y 1983.

Louis Burwell se estrenará como primer vicepresidente en el organigrama de la institución, mientras que Michael Tronick debutará como vicepresidente. Al mismo nivel de Tronick continuarán como vicepresidentas Kathleen Kennedy y Nancy Utley.

Uno de los mayores desafíos a los  que se enfrentará el nuevo dirigente de la industria cinematográfica más grande del mundo es el de la equidad racial y salarial de género.

Desde 2015, la Academia ha sido cuestionada por nominar en la temporada de premios a pocos artistas afroamericanos, mientras que las actrices alzaron su voz por ganar menos dinero que sus compañeros varones, incluso cuando ellas han sido las protagonistas de las historias. (I)