The Interview se estrenó, pese a las amenazas
Hasta hace menos de una semana en Hollywood se vivía incertidumbre por la entonces posibilidad de un ataque terrorista en caso de estrenarse la película ‘The interview’, de los estudios Sony, con Seth Rogen y James Franco como protagonistas.
‘The Interview’ relata la historia ficticia de David Skylark (Franco)y Aaron Rapoport (Rogen), 2 miembros de la industria televisiva que son contactados para visitar a Kim Jong-Un (interpretado por Randall Park), presidente de Corea del Norte, y aprovechando la situación son consignados por la CIA para asesinar al llamado “dictador”.
Las amenazas venían de parte de ‘hackers’ norcoreanos descritos por el FBIcomo Guardianes de la Paz (GOP, por sus siglas en inglés), quienes en noviembre pasado habían robado información clasificada en Sony, que incluía racismo, machismo y otros temas. Luego la difundieron.
Todo eso coincidía con el entonces anuncio del debut de la película.
Celebridades, como el actor, director y productor George Clooney, cuestionaron a la prensa estadounidense y a Hollywood por ceder (inicialmente) ante la amenaza.
Clooney había tildado de cobarde a la industria. “Los nombres importantes del cine corrían por las colinas a esconderse, mientras que los medios de comunicación tocaban el violín, mientras Roma ardía”, expresó en una entrevista al sitio Deadline.com.
Clooney criticó a los medios por haberse concentrado solo en el contenido frívolo de los correos reservados difundidos por los piratas informáticos, en vez de las implicaciones que las acciones de los hackers podrían tener en el futuro.
El actor Ben Stiller coincide con el criterio de Clooney y también defiende la libertad de expresión.
A tanto llegó la presión que inicialmente Sony decidió no estrenarla por temor a represalias, hasta que el presidente estadounidense, Barack Obama, se manifestó públicamente.
“No podemos tener una sociedad en la que un dictador pueda imponer su censura aquí en Estados Unidos”, dijo el presidente a CNN. “Porque si alguien es capaz de intimidarnos para no estrenar una película satírica, imaginen qué podrían hacer para que no veamos un documental que no les gusta o noticias que no son de su agrado. Eso no es lo que somos. Eso no es América”, agregó Obama en la cadena estadounidense.
Pese a las amenazas y tras la intervención de Obama, el filme se difunde desde la tarde del miércoles pasado, a través de Google Corp (http://play.google.com;YouTube (youtube.com/movies), Sony Corp(www.seetheinterview.com) y Microsoft Corp en un dispositivo para celulares y tabletas (http://video.xbox.com).
No obstante, para recuperar la inversión de $ 80 millones que se hizo en la cinta, el costo por verla será de $ 6 para rentarla y $ 15 para comprarla.
Según Google, “el pasado miércoles, Sony comenzó a contactar un número de compañías, incluyendo a Google, para saber si podríamos hacer que su película, ‘The interview’, estuviera disponible en línea”.
No obstante, la empresa menciona que “habíamos tenido una idea similar y estuvimos complacidos de ayudar -aunque dado todo lo que ha sucedido-, las implicaciones de seguridad estaban presentes en nuestra mente…”.
Google continúa: “Después de discutir los inconvenientes, Sony y Google acordaron que no podríamos quedarnos sentados y permitir que algunas personas determinaran los límites de la libertad de expresión en otro país (sin importar cuán bobo pudiera ser el contenido)”.
Además de la exhibición por Intenret, ‘The Interview’ se estrenó ayer aproximadamente en 300 cines de Estados Unidos, sin reportarse ningún ataque terrorista contra las salas.
Al respecto, el diplomático norcoreano, Kim Song, ante Naciones Unidas, dijo a The Associated Press que su país siempre se opuso a la difusión por internet de la película, que dura 112 minutos, y aseguró que no habrá ningún ataque terrorista, solo una “condena verbal”.
Song explicó que su país no tiene relación con el ataque y puede demostrarlo. También manifestó frustración por la negativa de Estados Unidos de aceptar la propuesta de Pyongyang para realizar una investigación conjunta sobre el tema.
Song reconoció que el gobierno de su país está indignado por el contenido de la película. “Es una burla imperdonable a nuestra soberanía y dignidad de nuestro supremo líder”, finalizó el diplomático norcoreano.