Según el director, en esta película tipo western no hay héroes, solo villanos y, además, aborda el racismo
Tarantino lanzó su filme Los ocho más odiados en Brasil porque le trae recuerdos
Quentin Tarantino ha lanzado en Sao Paulo, Brasil, la gira para presentar su octavo filme, Los ocho más odiados (The hateful eight), que según él es su penúltima película antes de retirarse. El nuevo filme, un western ambientado en la posguerra civil de Estados Unidos, tiene un detalle que se diferencia de sus antecesores. “Aquí no hay héroes, todos son villanos, no hay un centro moral, son sobrevivientes de una guerra entre gente del mismo país que están obligados a convivir todos juntos en la montaña nevada”, dijo el director de 52 años, ante una pregunta de este cronista.
Tarantino vuelve después de Django desencadenado a tocar en el racismo, eje de la guerra civil estadounidense. “El racismo fue ignorado siempre en el western. Si bien hago películas con temática americana, ellas tienen más aceptación fuera que dentro de Estados Unidos. Yo hago películas para el planeta”.
Su visión sobre el racismo lo ha enfrentado con el director negro Spike Lee, que puso en duda la capacidad de Tarantino para abordar el asunto en sus filmes. Y en Sao Paulo, Tarantino le respondió cuando le preguntaron sobre el director de Malcolm X: “Nunca trabajaría con Spike Lee. Me quedan dos filmes para hacer y no voy a desperdiciarlo con él”.
Su octava película fue lanzada en Sudamérica en una decisión inédita. “Elegí Sao Paulo porque aquí vine por primera vez en 1992 a presentar Perros de la calle. No tenía dinero para nada, me relacioné con el mundo a partir de la Muestra de Cine de Sao Paulo”, cuenta el creador de Kill Bill, Django desencadenado, Bastardos sin gloria y Pulp Fiction.
Durante la conversación con algunos corresponsales extranjeros y una conferencia de prensa al lado del británico Tim Roth, en uno de los mejores papeles de Los ocho más odiados, Tarantino ha paseado su histrionismo y vitalidad para sentenciar que quiere que su vida cinematográfica llegue apenas a una decena de películas.
“Haré 10 películas apenas. Quiero mantener siempre el nivel alto de calidad. No tengo esposa ni hijos, no hago filmes para comprarme mi segunda casa. Soy pretensioso, sí”, comentó el guionista que ha colocado en Los ocho más odiados una fotografía memorable de Robert Richardson al hacer un western en la nieve del norte estadounidense, Wyoming, y un elenco candidatísimo a estatuillas al Oscar, sobre todo Jennifer Jason Leigh, la hija del actor Vic Morrow y protagonista de Vidas cruzadas y otros éxitos de los años noventa, que es rescatada ahora por Tarantino.
El filme reúne a colosos para quien Tarantino, como de costumbre, les hizo un guión personalizado: Samuel L. Jackson, Tim Roth, Michael Madsen, el mexicano Demian Bichir, Jennifer Jason Leigh, Kurt Russell, Walton Goggins, Zoe Bell y Bruce Dern. Para próximas producciones, Tarantino dijo que les gustaría escribir guiones para Johnny Depp y su actriz tal vez más admirada de la actualidad, Kate Winslet. La película se estrenará el 7 de enero en Brasil, un día antes que en Estados Unidos.
Tarantino le entregó por primera vez la creación musical de una película a un compositor, al italiano Ennio Morricone, de Los intocables, El bueno, el malo y el feo, y otros. “Para mí no es el mejor músico del cine mundial, sino que para mí es el mejor músico de la historia de la humanidad, más que Beethoven, que Chopin. Él leyó el guión y compuso la música. Yo apenas la coloco donde mejor queda”. (I)