“La de la mochila azul, la de ojitos dormilones / me dejó gran inquietud y bajas calificaciones”, no es solo el tema que popularizó Pedro Fernández, cuando era niño, sino que también era la canción con la que el cantautor Stahl Sánchez enamoraba a sus vecinas cuando tenía apenas 3 años de edad.

Para el quiteño, que estudió Ingeniería Industrial, Administración de Empresas, Ciencias Políticas y Música, su desarrollo artístico inició a los 6 años cuando, tras migrar junto a sus padres a Estados Unidos, estudió violín.

“Siempre me llamó la atención la música por lo que mi madre decidió ponerme profesores privados. Lo malo fue que por culpa de mi maestro le cogí fastidio al violín”, acotó.

A los 12 años retornó al Ecuador, y ya en Quito le comentó a sus padres su decisión de ya no ser más violinista, por lo que vendió el instrumento para comprarse una guitarra eléctrica, cambiando así la música clásica por el rock.

“Era fans de la cadena MTV, ahí conocía mis referentes musicales en el género Guns N´Roses, Aerosmith, Skid Row, Metallica y Bon Jovi, quería ser como ellos”, agregó.

En la secundaria estudió paralelamente con Patricio Aizaga y Carmen Alonso en la Sinfónica Juvenil y Olga Dobrovolskaya, destacándose en varias agrupaciones de su institución.

Aunque su inclinación musical cambió dijo que nunca se desprendió de sus bases y de sus discos de Frank Sinatra, Sammy Davis Jr., Dean Martín y Ray Charles, pues indica que estos son para él artistas completos por su extraordinaria capacidad vocal, dominio escénico y forma única de interpretación. Marcando un antes y después en la música.

Al término de sus estudios decidió radicarse por algunos años en Estados Unidos para estudiar y desarrollar profesionalmente algunas carreras que le llamaron la atención, encontrando varios trabajos importantes en el ámbito político, ecológico, y fundando dos empresas de energía renovable.

Los años han transcurrido, ahora Stahl considera haber cumplido muchas de sus metas por lo que quiere enfocarse al campo musical. “Tengo más de 16 años preparándome para dar este paso y siento que es el momento indicado”, sostuvo.

Tras haber planificado durante más de dos años y medio la producción con Amed Medina, músico cubano radicado en México, que trabajó con Charlie García, Fito Páez, Laura Pausini, entre otros, dice que su disco logra proyectar la fusión de jazz, blues y rock sin olvidar los boleros y las melodías ecuatorianas, a las que dice adorar pues es parte de su cultura.

El material discográfico, que fue producido en México y masterizado en Estados Unidos, se llama ‘Locked Inside’ y será lanzado la próxima semana a nivel nacional; contiene 10 temas de su autoría: 6 en inglés, 2 en español y 2 en italiano y lleva consigo un fin benéfico ya que con la recaudación de sus ventas se ayudará a la fundación para la reinsertar en los estudios a los niños de la calle.