Hace cuatro años fue la última vez que Joan Manuel Serrat visitó Ecuador. El catalán está de vuelta con Hijo de la luz y de la sombra, su nuevo disco, uno en el que nuevamente la poesía se combina con su voz. Y es que a Serrat es imposible dejar de relacionarlo con la poesía. De hecho, gran parte de su discografía está dedicada  a  ponerle música a los poemas de extintos talentos como su compatriota  Rafael Alberti, el uruguayo Mario Benedetti o el chileno Pablo Neruda.

Ese vínculo empezó en 1968 cuando editó  su  primer álbum literario que dedicó al sevillano Antonio Machado. Cuatro años más tarde desempolvó los versos del poeta Miguel Hernández.  Serrat  retoma las creaciones de Hernández con un nuevo disco: Hijo de la luz y de la sombra y paralelamente emprende una gira que lleva el mismo nombre y que permitirá al catalán cantar este sábado en el Coliseo Rumiñahui de Quito. El artista, que  tiene previsto llegar hoy al país, será condecorado por el Gobierno como Embajador de Buena Voluntad del Yasuní.

Reconocimiento  que también han recibido los estadounidenses  Bo Derek y Woody Allen en su paso por Ecuador.Hijo de la luz y de la sombra es el último trabajo discográfico  que el cantautor grabó junto a Joan Albert Amargós, en 2009, y editó al año siguiente. El disco está compuesto por 13 poemas del desaparecido bate. Entre ellas constan El hambre, el mundo de los demás, Tus cartas son un vino y si se me matan, bueno.

Según  el artista, que el año pasado se alejó de los escenarios porque fue operado de un nódulo pulmonar,  una de las principales  razones que lo llevaron a hacer un disco basado nuevamente en los poemas de Hernández, se debió a   la vigencia de su poesía. “Sus versos son versos que trascienden el tiempo en el que él los escribió y que se acomodan perfectamente en el presente”, asegura.

Serrat, quien se  gradúo como perito agrónomo en 1965, debutó como cantante en un programa  radial de Barcelona y esa actuación  le permitió grabar su primer álbum, que estuvo compuesto por temas  en  catalán. Aquel hecho lo convirtió en uno de los  iniciadores de la Nova Cançó catalana, un género que identifica a cantautores contestatarios de esa región.Sin embargo,  Joan Manuel, hijo de padre catalán y madre aragonesa, pronto empezó a cantar también en castellano.

Y aunque en un principio su decisión estuvo expuesta a críticas, más tarde el artista logró ser  candidato a representar a España en el festival de Eurovisión de 1968. A partir de allí sus canciones en español tuvieron la misma aceptación que con las que se dio a conocer.

Serrat ha recibido  a lo largo de su carrera importantes reconocimientos. Entre ellos la Medalla de Oro al Mérito del Trabajo, concedida por el Gobierno español en 2006; el título de doctor honoris causa por la Universidad Complutense de Madrid por su contribución a la lengua española en general y el título como Caballero de la Legión de Honor de la República Francesa, en 2007.

Con más de veinte discos grabados en catalán y en español, Serrat regresa con Hijo de la luz y de la sombra,    con el que revive una vez más los poemas de Miguel Hernández.