El guitarrista Carlos Santana describió su próxima obra, Africa Speaks (África habla), como “un disco directo a la luz interior que habita en el corazón”.

A sus 71 años, sus pensamientos “místicos”, como él los denomina, se plasman en las once nuevas canciones, gracias a ritmos y melodías del continente africano, el cual ha visitado en varias ocasiones.

“África está conectada con nuestros orígenes, cuando los primeros hombres de la Tierra no estaban atados a la tecnología hasta el punto de estar desconectados de ellos mismos como ocurre ahora”, relató el legendario músico.

La música negra ha sido importante para su inspiración incluso antes de que su interpretación de “Soul Sacrifice” y de que sus raíces latinoamericanas hicieran historia en el festival de Woodstock (Bethel, Nueva York, EE. UU.) en 1969.

“Al instante de escuchar los compases africanos, empiezas a bailar sin saber por qué y sus vibraciones te recuerdan que, si no estás contento contigo mismo, no funcionará nada de lo que hagas. Todo es tan simple como ser feliz”, reflexionó.

“Como dijo Maya Angelou -escritora, cantante y activista estadounidense por los derechos civiles-, la gente olvidará lo que dijiste y lo que hiciste, pero nunca olvidará cómo la hiciste sentir”, citó el músico.

A la cadencia africana y los solos de guitarra de Santana que aparecen en Africa Speaks se suma la voz gitana de la cantante española de padres ecuatoguineanos, Concha Buika, un “diamante en bruto” para el artista, quien asegura oír a Nina Simone, Etta James, Tina Turner y Aretha Franklin en sus canciones.

El álbum de estudio número 25 de Santana ha contado con la colaboración del productor discográfico Rick Rubin, además de los ocho integrantes que forman parte de la banda, entre los que se encuentra la baterista Cindy Blackman Santana, su “diosa, amante, compañera musical y amiga”, confesó.

Sus nuevos temas los grabó en los Shangri-La Studios de Malibú y se publicarán el 7 de junio. (I)