El cineasta francopolaco Roman Polanski, acusado por la francesa Valentine Monnier de haberla violado en 1975, rechaza esa acusación "con la mayor firmeza", indicó su abogado, que está estudiando una "acción judicial" en respuesta a ese testimonio.

"Polanski rechaza con la mayor firmeza esta acusación de violación", afirmó Hervé Temime en un comunicado transmitido a la agencia AFP. "Estamos trabajando en las acciones judiciales para responder a esta publicación", señala el abogado.

En un testimonio publicado por el diario Le Parisien, Monnier, fotógrafa, exmodelo y que actuó en algunas películas en los años 80, acusa al cineasta de haberla golpeado y violado en 1975 en Suiza cuando ella tenía 18 años.

Esa acusación se añade a las de otras mujeres en los últimos años, igualmente negadas por Polanski, quien sigue en la mira de la justicia estadounidense en el marco de un proceso por abuso de menores iniciado en su contra en 1977.

Unos días antes, la actriz Adèle Haenel acusó al director de cine Christophe Ruggia de haberla acosado y de haberle realizado tocamientos  entre 2001 y 2004, cuando ella tenía entre 12 y 15 años y él entre 36 y 39. Los acusados niegan los hechos.

“En 1975 fui violada por Roman Polanski. Yo no tenía ningún vínculo con él, ni personal ni profesional, y apenas lo conocía. Fue de una extrema violencia, después de esquiar, en su chalé, en Gstaad (Suiza). Me golpeó hasta que me rendí. Después me violó haciéndome sufrir todas las vicisitudes. Yo acababa de cumplir 18 años”, declara Valentine Monnier a Le Parisien.

Monnier recuerda que “encontró refugio” en casa de un amigo de Polanski. En su momento no denunció los hechos, que ya han prescrito. Y habló de ello a pocas personas. Hasta que en 2017 las revelaciones sobre Weinstein la animaron a enviar cartas a la policía de Los Ángeles y a varias personalidades, entre ellas Brigitte Macron, esposa del presidente francés.

Le Parisien obtuvo el testimonio del amigo de Polanski que acogió a Monnier y apoya su versión, también el de otras personas a quienes durante las décadas siguientes la joven les explicó lo ocurrido. Pese a que muchos de estos testimonios son anónimos, “todos han aceptado firmar un documento y ponerse a disposición de la Justicia si la evolución del asunto lo necesitase”, escribe Stéphane Albouy, director de Le Parisien.

Polanski, requerido por la Justicia de Estados Unidos por el caso en 1977 Samantha Geier, que tenía 13 años, estrenará esta semana en Francia Yo acuso, una película sobre el caso Dreyfus, el capitán judío falsamente acusado de espionaje para Alemania a finales del siglo XIX. (I)