En el 2008, en medio de libros, bisturí, guantes, pinzas e inyecciones, Carlos Enrique Sarmiento Mulet cuestionaba su futuro. Tenía 22 años, cursaba el tercer año de Medicina y aunque seguía esta carrera por tradición familiar, no era feliz: él quería ser cantante.

Su mayor frustración era no poder estar frente a un escenario y por ello, a sabiendas de que a sus padres les afectaría su decisión de abandonar sus estudios, optó por enfocarse a promocionar su carrera musical. Fue así que escogió el nombre de Onyl, este en referencia a su ídolo Shaquille O’Neal, ex basquetbolista estadounidense de Los Lakers.

“Mi padre es traumatólogo y mi madre ginecóloga, ambos pertenecen a la tercera generación de médicos. Ellos anhelaban que como hijo único siguiera sus pasos, pero no fue así”, detalló.

Al notificarles su decisión, ellos se resignaron, pues conocían la pasión que su hijo sentía por el canto, ya que desde los 13 años conformó varios grupos de música urbana con el que tocaba reggaetón, hip hop, entre otros géneros musicales. Producto de esto -a los 16- participó en el Festival Romerías de Mayo, catalogado como el más grande en su país. “Era inevitable. En cada esquina de Cuba las personas se dedican a hacer música y fue así como comenzó esta pasión”, comentó.

Luego de abandonar su carrera de Medicina crea un dueto junto a su compatriota Kirel y después de promocionarse en otros países, como Ecuador y México, decide separarse y seguir una carrera como solista. “A pesar de conocernos desde hace varios años es un problema liar con los pensamientos de otras personas. Al ver que no seguíamos los mismos objetivos decidí continuar mi camino en solitario”, expresó.

Reconoció que abrirse campo en el mercado musical es complicado, por lo que regresó a probar suerte en México y Panamá, tras un fallido intento optó por enfocar su carrera en Ecuador. “Mis padres radican y ejercen su carrera desde hace 10 años acá, así que no había otra alternativa que seguir con mi carrera musical en este hermoso país”, puntualizó.

Una vez que alcanzó una preparación adecuada (estudió en la Universidad de Especialidades Espíritu Santo de Guayaquil, las carreras de Producción Musical y Producción de Sonidos), lanzó su primer sencillo, ‘Enamorada’.

La canción que era un merengue tropical, a pesar de que sonó, no lo catapultó como deseaba. Agregó que fue su culpa, debido a que no la promocionó como tenía que ser. “Tuve algunos problemas personales que me apartaron de mis planes. Sin embargo, ahora sí voy a reventar los diales del Ecuador”, declaró.

Tras un receso Onyl regresa recargado y presenta su nueva melodía ‘Tikita’, un mambo electrónico que produjo Franco Rodríguez, conocido en el mercado como Franky Records, quien al cabo de varios años lanza su casa disquera con este artista.

La melodía de su autoría trata sobre el desenfreno y otras pasiones que siente el corazón al enamorarse, pues su mayor inspiración siempre ha sido el amor.

Para el artista, presentar este proyecto trae consigo varias sorpresas, ya que al ser el primer cantante oficial de la casa disquera de Franky le trae buen augurio a su futuro musical.