El cantante Franco de Vita se reencontró, el viernes pasado, con el público quiteño en el coliseo Rumiñahui.

De Vita repitió el show, que un día antes había ofrecido en el Centro de Convenciones Simón Bolívar, que estuvo marcado por los invitados del cantautor venezolano. Con él estuvieron sus compatriotas Carlos Baute, Servando y Florentino, la costarricense Debi Nova, más los ecuatorianos Daniel Betancourth (foto) y Mirella Cesa.

El cantante venezolano saltó a las tablas vestido con ropa de cuero de hechuras amplias y con un pañuelo al cuello, respaldado por una fuerte percusión.

Sin embargo, las cosas no comenzaron bien, pues tuvo que iniciar los acordes sin luces en el escenario por una falla eléctrica. A Betancourth, el primer invitado de la noche, le tocó lidiar con la falta de luz, pero De Vita y él lo solventaron con humor, iluminándose con una linterna uno al otro.

Casi a la medianoche, De Vita, que se mostró energético y con un semblante sonriente durante el concierto en Quito, obsequió a los asistentes un popurrí de grandes éxitos, entre ellos Será, Tengo, Te veo venir soledad y Aquí estás otra vez.