Las casas apagan sus luces multicolores, las envolturas de los regalos se despliegan en desorden por la sala y el sonido de los villancicos permanecen compaginando el clima junto con los adornos verdes, rojos y amarillos que no necesitan de electricidad para brillar. En la casa de la cantante Michelle Cordero todos están ansiosos y a la espera de la sobrina -hija de su hermana mayor-, mientras tanto se disponen a orar.

“Desde pequeños les inculqué la oración como tradición, considero que es el momento preciso para comunicarse con Dios; para agradecer por todas sus maravillas brindadas a lo largo del año”, comentó Silvia González, madre de la joven artista.

Su padre Fabián y sus hermanos mayores Silvia (diseñadora), Marcelo (productor y músico) y Gabriela (relacionista pública) se disponen a preparar el desayuno y los quehaceres domésticos.

“Cada uno aporta en el hogar, considero que todos formamos un equilibrio: Silvia es la que me ayuda a adornar la casa, Marcelo prepara la cena, mientras que Gaby y Michelle coordinan en todas se ‘huele’ la Navidad”, sostiene González.

Para Michelle Cordero, ésta es época de rezar por los que más necesitan, de compartir, de aportan con su don -voz- a nobles causas y de prepararse nuevos retos en el que contribuya a la sociedad y ecología.

“Los seres humanos necesitamos protección, pero los animales también es por eso que hace años mi hermano creó un albergue para los caninos desprotegidos; aquí les damos un hogar provisional, cariño y amor hasta que alguien de buen corazón lo adopte y lo haga parte de familia”, relató Michelle.

Destaca que son cachorros que al igual que un niño necesitan protección y ternura y que a ellos también le harán hoy una fiesta, pues cristo es sinónimo de cariño y amor, justo lo que las futuras mascotas aportaran a sus dueños.

Marcelo agrega que su objetivo es crear una fundación- legalmente constituida- y que se difunda su labor para que los que deseen se unan a esta noble causa.

Gabriela, quien es relacionista pública de Michelle, explica que posiblemente todo se cristalice muy pronto pues actualmente está terminando su segunda carrera en jurisprudencia y será ella quien aportará en la parte legal.

Silvia Cordero resaltó que todo es un proyecto familiar, en el que todos participan.

“Mi papá es profesor universitario, es el que se encarga de crear el proyecto, Gaby de legalizarlo y mi mamá, Marcelo y Michelle de difundirlo”, comentó.

Ella es madre de Samantha, de 10 años y manifestó que ambas- aunque no viven en la misma casa- aportarán en lo necesario. Al igual que lo hacen en las entregas de canastas a ancianos que realizan de forma voluntaria anualmente.

González, dice que la tradición de obsequiar canasta a los adultos mayores inició hace casi 30 años, cuando ella y su esposo eran novios y comenzó con 5 fundas, actualmente entregan entre 500 canastas ala fundación “Amigos”.

“Espero que no se pierda esto es tan grato ser solidario y al menos veo hasta la tercera generación -Samantha- participar con entusiasmo”, recalcó.

Por su parte, Fabián Cordero, está orgulloso de su familia, de gran corazón que entregan a los demás.

Michelle dice que todo esto es parte de los valores inculcados por sus padres quienes con el ejemplo sembraron la semilla de la generosidad en sus corazones.

“También llevamos alegría a los niños con cáncer, es un poco duro ver esa cara de la moneda, pero es real y es tan satisfactorio saber que aportas con un granito de arena tal vez no para que el mundo mejore pero si para iluminar por unos minutos el mundo de unos seres tan maravillosos”, explicó Michelle.

Según su relacionista pública, Michelle es una adolescente llena de energía quién siempre se destaca por el ánimo que lleva a cada fundación.

“Es la que arma los juegos y la que anima a los niños y ancianos. Nos da orgullo ver que es la representación digna de toda nuestra labor. Su carrera la manejamos en la familia y cuando vemos que ella saca una sonrisa todos nos adueñamos de ella”, confesó Gabriela.

De la misma forma, aprovecha la ocasiones para promocionar su nuevo single “Busco un corazón sincero” que se postula como mejor canción del año en distintos diales. Asimismo entonar uno que otro villancicos que le recuerda su infancia vivida- hace escasos años atrás-.

“Es complicado inicié mi carrera muy pequeña -7 años-. Sin embargo, siento que he evolucionado artísticamente y aún hay personas que no se explican como crecí tan rápido -sonríe es realmente gratificante ver que ese público que te acompañó de niña me sigue a pesar de los años, creo que ese es el mejor regalo de Navidad que recibo anualmente de mis seguidores. Sus bendiciones y buenos deseos que sé que salen de corazón”, expuso Michelle.

Concluye diciendo que para ella “Navidad es época de oración y reflexión”.

Plegarias van y vienen, todos se toman de las manos y a liman pequeñas asperezas propias de una familia, se piden perdón por algún mal rato y prometen mejorar sus aptitudes y actitudes. Agradecen e las bendiciones, los éxitos, los sin sabores, la salud y prometen ser mejores hijos, mejores padres y mejores seres humanos ante los ojos del Creador.

En Cuenca los Cordero González festejan el nacimiento del niño Jesús con un mes de anticipo y aunque se acabe la fiesta ese “niño” seguirá viviendo en sus corazones llenándolos de bendiciones.

Ocho años de trayectoria

Michelle Cordero, inició su carrera musical en su natal Cuenca a los 7 años. Actualmente posee dos disco y una edición especial de DeLuxe. Es considera como la artista más joven de los MTV. Con 15 años posee un título como productora musical de la Universidad de Cuenca. Un título de colegiatura online de Gestión Empresarial. Actualmente estudia dirección y ejecución de audiovisuales. Fuera del escenario musical prepara el lanzamiento de una línea de ropa y de zapatos que realiza con la asesoría de sus hermanos mayores (Silvia, Marcelo y Gabriela). Su sangre artística la heredó de su madre Silvia González quien es productora musical, cantante y locutora.