El amor que siente por la música la cantante manabita Maritza Vilche apareció cuando tenía tres años, edad desde la que recuerda ver a su madre, Lidia Alcívar, interpretando sus temas en distintos escenarios. Su padre era quien la llevaba a todos estos eventos, por lo que creció rodeada de un ambiente musical.

A los 13 hizo su primera aparición ante un medio de comunicación como cantante, cuando su madre la llevó a la provincia de Santa Elena (antes cantón del Guayas) para que cante en la radio ‘La voz de la Península’.

Temas que se han dado a conocer en la voz de Rocío Dúrcal, Juan Gabriel, entre otros artistas, son los que Maritza interpretaba cuando estaba al aire.

Cinco años más tarde, cuando alcanzó la mayoría de edad, se unió a Las Chicas Dulces, agrupación a la que perteneció por 12 años. Con este grupo femenino no solo visitó todas las provincias del país sino que se radicó por tres años en Europa, pues hicieron una extensa gira de conciertos en el extranjero.

Al retornar a Quito estuvo alejada de la música durante dos años, tiempo en el que tuvo a sus dos hijas y se dedicó por completo a cuidarlas. Pero su tarea de madre la comenzó a combinar con su carrera artística a mediados del 2011, cuando creó el trío Flash Dance, y empezó a sonar en los medios locales con el pop tropical ‘Sobeson son son’.

Tras hacer un cambio de integrantes y promocionar el tema ‘Juntos’, a finales del 2012 Maritza se presentó al público con la cantante y modelo machaleña, Bella Querevalo, como el dúo Guerreras de Dios, quienes se calificaron como “cristianas apartadas”, que ahora querían dedicar sus temas a Dios y enviar un mensaje positivo a través de sus melodías.

Hace tres meses Bella decidió continuar con su carrera de modelo y dedicarle más tiempo a sus estudios universitarios y a su hijo de tres años.

Ahora, Maritza continúa su carrera artística en solitario, y aprovechó el contacto que tiene con el productor cubano Michel Sierra para sacar su primer disco con ocho canciones cristianas, unas de su autoría, y otras composiciones de su madre.

La colaboración de Sierra en este álbum es lo que le pone el toque tropical y caribeño a cada una de las melodías, según indica Vilche. “El disco ya está listo, visito los medios para promocionarlo y está a la venta en las librerías cristianas.

Actualmente viajo mucho a ciudades ecuatorianas, tanto de la Costa como la Sierra, para predicar y dar mi testimonio de todo lo que Dios ha hecho en mi vida, es difícil porque tengo que organizarme en mi hogar, con mi esposo y mis hijas; además, cuento con una agencia de modelos y me encargo de las relaciones públicas de los eventos que hace mi esposo (Edwin Ernesto Terán)”, comenta la cantautora, quien también ha sido invitada a congresos religiosos en el extranjero, y posiblemente para finales de este año visite algunas iglesias de Italia y Estados Unidos.

‘Volver a nacer’ se titula el material discográfico que lanzó este mes. “Lleva ese título precisamente porque ahora soy otra persona en todos los aspectos de mi vida”, agrega.

Al hablar sobre el por qué ahora interpreta música cristiana, Maritza resalta que los problemas personales que tuvo el año pasado, como la separación con su esposo, la hicieron dar cuenta que tenía que ordenar su vida. “Dejé mi vida pasada, que era llena de apariencias, y ya no quiero cantar para el mundo, así que decidí cantarle a Dios, y quienes me conocen están contentos de ver este cambio”, dijo la artista, que por el momento promociona ‘Conocí a Cristo’, tema compuesto por su madre.