Manta colapsó. Era como si a las 19:00 no existieran taxis en la ciudad. Tomar uno de esos carros amarillos era misión imposible. En el sector del centro de la ciudad, cerca a Autoridad Portuaria, no habían muchos vehículos transitanto. El tráfico estaba en las cercanías al estadio Jocay.

En calles cercanas al escenario, era como si los carros no se movían. Todos se dirigían hacia el concierto que brindó Ricardo Arjona la noche del pasado viernes. Era la primera vez que el artista guatemalteco se presentaba en Manta y el estadio Jocay se llenó, algo que no sucede muy a menudo...

Las largas colas para ingresar estuvieron desde más de 7 horas antes de que inicie el show (arrancó 21:20). La espera para ingresar se hacía eterna, es como si se hiciera una comparación con la canción Minutos, del propio Arjona.

Para Belén Cedeño, el que se realice un concierto de esta categoría es algo que le da realce a la ciudad. "Es la primera vez que viene un artista como Arjona, será un concierto espectacular. Ojalá se repita este tipo de show con cantantes como Ricky Martin o Maná", lanzó Cedeño, cuya canción favorita del repertorio del centroamericano es El Problema.

Había quienes dedicaban su tiempo a jugar naipes, otros que se ganaban unos dólares haciendo fila para otra persona... los vendedores no podían faltar. "habla, lleva tu gorra de Arjona, cuesta doce dólar, pero te la dejo en zota ($ 10)", le dijo un comerciante a una pareja.

Nadia Cevallos vive en Portoviejo y es fan de Arjona, de esas que se saben de todos las canciones, todas. Ella, al enterarse que su ídolo estaría en Ecuador, compró una entrada para el concierto en Guayaquil. Poco después se confirmó que habría un show en Manta, Nadia también compró boleto para estar en el Jocay.

"Ya estuve el miércoles en Guayaquil, en segunda fila, vi a mi hombre tan bello. Hoy no me podía perder el espectáculo acá en Manabí, pero ya compré entrada para tribuna", indicó la emocionada fan.

Una vez adentro, la gente estaba ansiosa. "Arjona, Arjona, Arjona", se escuchó en coró desde pasadas las 19:00. El telonero de Ricardo fue Douglas Bastidas, exvocalista del grupo ecuatoriano Tranzas, quien entretuvo por media hora a los presentes, con canciones como Dile, Debes buscarte un nuevo amor o Morí.

Cuando el público se impacentaba, el sonido de la llegada de una locomotora a estación alertó a todos. Arjona arribaba al escenario. No se lo veía. Ya había empezado a cantar la A la luna en bicicleta, pero todavía no se divisaba. Solo salían videos de él, en una pantalla 3D que colgaba por todo el escenario.

De pronto, entre el juego visual, apareció el guatemalteco, pedaleando una vieja bicicleta, que tenía megáfonos en la parte frontal. La entrada estuvo impecable, así como el resto del show, en el que el público secundó al artista canción tras canción.

La segunda canción fue El Problema, quizás la más cantada por todo el estadio. "No es un reclamo, solo una inquietud... por qué no me habían invitado antes Manta", preguntó el cantante, lo que generó diversos grito en el estadio. "Te amo Arjona", era lo que más se escuchaba.

Si el Norte fuera el Sur, otro himno de los "arjonianos", se cantó con gran sentimiento. Previo a cantar Desnuda, Arjona habló acerca de la crudeza de su canción. "Lo que voy a decir ahora, es más sutil decirlo en canción. Para muchas puede sonar fuerte que se lo digan con palabras secas, por eso yo se los canto"... "No es ninguna aberración sexual, pero me gusta verte andar en cueros..."

Arjona subía y bajaba entre canciones en el escenario de dos pisos. Interactuaba con sus músicos, con el público. Leyó pancartas de las primeras que estaban en las sillas de adelante.

No podía faltar la canción ícono del centroamericano, Historia de taxi. Justamente eran las 10 con 40 (22:40) cuando Arjona cantaba esta canción. El guatemalteco no dejó el escenario sin antes prometer volver.

A la salida del show, en los exteriores del estadio, los taxis estaban llenos. Las carreras, que normalmente cuestan $ 2.5 desde el escenario hasta la Flavio Reyes, esa noche costaron entre $ 5 y $ 7.

Tras todo esto, Arjona continuó su Viaje (nombre del tour) por Ecuador, ya que le siguen dos conciertos en Quito.