La propuesta escénica tendrá 9 funciones, la última será el 15 de noviembre
Las Brujas se unen hoy en el Sánchez Aguilar
Han pasado 25 años sin verse desde que salieron del colegio religioso en el que estudiaban. Ahora, Elena (Montse Serra), quien está casada con un alto ejecutivo, es la encargada de reunir al quinteto de amigas para saber de sus vidas, aunque en el fondo lo que necesita es descubrir algo que ha hecho una de ellas.
En síntesis, esa es la nueva propuesta teatral que la directora ítalo-ecuatoriana Marina Salvarezza lleva a las tablas del Teatro Sánchez Aguilar, bajo el nombre de ‘Brujas’, original del español Santiago Moncada, estrenada en 1988.
A esta cita, acudirá Carlota (Elena Gui), una escritora bohemia y más intelectual del grupo. También irá Luisa (Rosymar González), la más sensual de estas amigas, quien es dueña de una honestidad tan directa, franca y descomplicada que puede ser mal vista por sus compañeras.
“Luisa es una mujer con una postura muy moderna ante la vida. No está casada y es una chica muy coqueta, sexy, divertida y sinceramente, es la más sincera del grupo. No esconde nada y asume la vida con franqueza, trata de ser la más solidaria”, sostiene la venezolana, quien se identifica con su personaje en algunos aspectos de su vida.
“Nos parecemos en esa forma de ver la vida siempre tan positiva, llena de mucha energía y chispa. Evidentemente hay cosas que no nos parecemos, no puedo ser tan franca como Luisa o esa postura tan abierta de la relación de pareja por ejemplo”.
Antes de asumir el papel de Luisa, González tuvo que ponerse en la piel de los otros personajes para ver en cuál encajaba mejor. “Todos los personajes son muy lindos y marcados. A mí me hubiese gustado ser Elena porque es la más tradicional, pero al mismo tiempo vanguardista, pero también me siento muy cómoda con Luisa”, refiere.
Cuenta que ha sido gratificante ver que, a la salida de las funciones, muchas mujeres se le han acercado para felicitarla por actuación y porque se han sentido identificadas con Luisa. “Lo que pasa es que Luisa describe todo lo que una mujer quieres ser en el fondo”.
Otras de las invitadas a la velada es Hortensia (Prisca Bustamante), una mujer tradicionalista, serena y apacible que le da el balance justo a este cuadro de cuarentonas.
“Este es el personaje más tranquilo y tradicional. Mezcla mucho drama pero al mismo tiempo comedia y eso lo vuelve interesante”, reseña la actriz peruana, quien hace 18 años, actúo en la misma obra con otro personaje, bajo la dirección del actor, dramaturgo y director guayaquileño Javier Romero, quien falleció el año pasado en la ciudad de México.
“Trabajar con Javier y a ahora con Marina no ha tenido muchas diferencias. En ambos casos, todo ha sido muy natural. Obviamente Marina le ha dado más movimiento a la obra porque el espacio así lo requiere. Hace 18 años la hice en la sala experimental del Centro de Arte y ahora, en la sala principal del Sánchez Aguilar que es un monstruo de escenario que tiene algunos metros de alto y ancho y que necesita de más agilidad porque si no se nos vería como unas pulguitas”.
Sobre esta historia, Bustamante dice que, de cierto modo, el perfil de cada uno de los personajes son características de mujeres en la vida real. “Cada persona es un mundo desde luego, pero si es verdad que entre amigas hay cosas que una le oculta a la otra y a veces, se necesita de una copita para hablarlo, decirlo o revelarlo. Obviamente aquí se ha magnificado todo para ensalzar la obra, pero estas cosas si existen (risas) y más cosas que ni se imaginan, pero pasan en la vida real. Hay momentos en que una simplemente aprovecha esa situación para decir las cosas, porque lo necesita”.
La actriz recuerda que en la puesta escénica que hizo en el Centro de Arte, en medio de la obra, una pareja se puso de pie y se fue. “Habrán personas que se ven reflejadas en los personajes y no sé si se sentirán cómodas, pero esto es así. Nosotros lo hacemos con mucho respeto y nuestra misión es entretener”.
Montse Serra destaca la complicidad que existe entre el elenco de la obra. “Si no hubiera complicidad entre nosotros no podríamos presentar esta obra porque cada una de estos personajes tienen una personalidad bien marcada y para que fluya la relación entre ellas, debe haber química entre las actrices. De lo contrario el público se daría cuenta y las escenas no fluirían”.
Para Serra es la primera vez que trabaja junto a Marina Salvarezza, a quien describe como una mujer que sabe lo que quiere conseguir y eso “como equipo nos da mucha seguridad” porque su experiencia en el teatro. Destaca además la escenografía que está a cargo de Roberto Frisone. “Está muy bien hecha y la verdad es que la gente se va a impresionar”.
El elenco de Brujas lo completa Gexa Paredes en el papel de Amelia, una agresiva abogada con dificultades en su matrimonio. (I)