Cuando el pianista quiteño Juan Pacheco ganó el concurso del Instituto Confucio de China en 2014,  que consistía en adaptar música oriental a los arreglos latinoamericanos, no imaginó que iniciaría una estrecha relación con la cultura del gigante asiático.

Fue su primer acercamiento con Asia, pues estuvo un mes, y participó junto con Alonso Quijano,  intérprete de ocarina, en diversos escenarios. Ambos tocaron en el Festival de Ocarina realizado en China en agosto.

Dos años después, Pacheco recibió una beca del Programa Young Leaders Fellowship, auspiciado por el gobierno Chino, para que realice una adaptación de sus temas tradicionales al sistema occidental, con arreglos para piano y ocarina.

Por segunda vez viajó allá, y el resultado está en el disco Nubes plateadas, el cual Pacheco lo trabajó junto con Alonso Quijano, intérprete de ocarina.

La investigación consistió en escoger sus melodías y adaptarlas de su sistema musical numérico (oriental), al occidental.

“Con Alonso pasábamos en la biblioteca todo el día para escuchar las canciones chinas, fueron como 100, porque tenían que ser aptas para hacer la adaptación en el piano y ocarina”, relató.

En total, se escogieron 10 temas para el álbum, y tomó 6 meses entre la investigación, adaptación y producción (junio a diciembre de 2016).

Entre las melodías tradicionales se encuentran ‘Las olas de Gulangyu’, ‘Nubes plateadas persiguiendo a la luna’,  ‘La dama Mengjiang’ y ‘Caballos compitiendo’.

El CD fue producido por Xou Xianbao y Juan Pacheco, y se grabó en los estudios del Instituto de Arte de la Universidad de Xiamen, ubicada al sur de China.

Pacheco explicó que el proyecto además del disco, también consistió en plasmar el trabajo en el libro titulado ‘Arreglos para piano y ocarina de Música Tradicional China’, y que está escrito en tres idiomas: chino, español e inglés.  El libro y el disco ya están en las universidades de  China.

Tanto Pacheco como Quijano residieron en la Universidad de Xiamen, durante el semestre que duró la  investigación. “Es una miniciudad, había que ir de un lado a otro en moto, recordó el pianista.  

En ese tiempo, los músicos quiteños también aprovecharon para brindar conciertos en diversos escenarios como el Chigasaki Hall en Japón, el Dongja Art Hall en Corea del Sur, y Chiayi Hall en Taiwán.

En Tokio, Japón, se grabó la canción 9 del disco, La dama Mengjiang con Akimitsu Leonard Takagi, como músico invitado en la ocarina.

Para Pacheco esta investigación  es un importante intercambio cultural entre Ecuador y China,  que se ha reflejado en la buena recepción del público asiático en los diversos shows que ofreció junto a Quijano en Asia.

Este pianista proviene de una familia de casta musical. Su abuelo Carlos Pacheco, también toca el mismo instrumento. Su padre, Juan Pacheco, toca el corno francés en la Orquesta Sinfónica del Ecuador. Su madre, Cecilia Aguirre, es cantante, y sus tíos son parte del Trío Colonial.

Juan Pacheco (Quito, 1990)   toca el piano desde los 5 años, instrumento que estudió en el  Conservatorio Nacional, y se graduó en música clásica. En 2010, ingresó a la Universidad San Francisco de Quito (USFQ) y se especializó en jazz. Luego de esta experiencia en Asia, Pacheco piensa en hacer una maestría.

Por ahora, Juan Pacheco se prepara para volver a China entre julio y agosto.

“Me pidieron que dé una clase magistral de 2 semanas, para explicar cómo trabajé este proyecto”.  La relación con el gigante asiático va para largo. (I)