Su acento colombiano está bien arraigado y no es para menos, ya que José Luis Ospina Marquínez desde los 2 años de edad fue llevado por sus padres, desde Guayaquil -donde nació-, a vivir en Tumaco, Colombia.

Cuatro años después su residencia oficial se asentó en Cali, ciudad donde realizó sus estudios y descubrió, a los 11 años, que le gustaba cantar. “Fue en el colegio Santa Librada donde tuve la oportunidad de conocer a Virgilio Hurtado uno de los cantantes de la agrupación Los Hermanos Lebron”, relata.

Fue así como le cogió el gusto a la salsa. Lo hizo primero cantando covers como ‘Llorarás’, de Oscar D’ León o ‘Pensando en ti’, junto a la orquesta Son de la Molienda, que formó con 12 chicos del colegio donde estudiaba.

Mientras crecía también iba empapándose más de la música. Entonces decide cantar con orquestas del barrio. “En Cali, en cualquier sector uno puede encontrar una orquesta ensayando en un garaje y con jóvenes que tienen mucho talento. Nadie sospechó que era ecuatoriano, aunque soy colombiano también”.

Anduvo promocionando su voz en discotecas y coliseos con la orquesta de turno, pero a la vez se daba tiempo para visitar Tumaco, San Lorenzo y Limones donde ya era conocido y tiene parientes.

En el año 2006 se encuentra con un gran amigo suyo, ‘Lele Vocero’, con quien decide formar el dúo ‘Negro Jose (él aclara que se escribe sin tilde) y Lele Vocero’, cantando salsa urbana romántica hasta 2010, en que se lanza al medio artístico como solista, trabajo que le ha dado gratas satisfacciones y le ha permitido recorrer Colombia.

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‘Negro Jose’, como se hace llamar en el medio musical, se encuentra promocionando ‘Amándote en silencio’, tema promocional de su álbum ‘Perseverancia’.

Este CD incluye 13 canciones que las anexó según como produjo sus sencillos.

Sobre esta canción indica que salió con el sello PQ15, pero que ahora, con la empresa Pentágono Récords, está haciendo la promoción de su material en el país.

También dice que con este sello lanzará al mercado su nuevo álbum ‘Nuevo y distinto’, que tendrá las mismas 13 canciones, con la diferencia de que a mi género, la salsa urbana, se le fusionará el R&B.

“La música urbana se puede escuchar en cualquier estrato social, cuando se hace con un mensaje claro, positivo. Por lo menos con lo que yo escribo pienso que cualquier persona se puede identificar con ellos. Además, lo importante es pasarla bien y gozarla. En Guayaquil se sabe gozar bien”. (I)