Desde que Carlos Anibal Puente Lino tenía 7 años los sonidos del rondador, la batería y el órgano, que salían del cuarto donde ensayaba su padre para sus presentaciones, empezaron a envolver su gusto por la música y a escondidas trataba de entonar los instrumentos. “Solo lo hacía cuando él no me veía”, recuerda.

Precisamente a esa edad, luego que su padre lo escuchara cantar el tema ‘En vida’, de Gerardo Morán, empezaría a gestarse su camino como intérprete infantil bajo el nombre de Capulí.

“Tomé las iniciales de sus nombres y apellidos, pero también fue en honor a la fruta conocida de mi querido Otavalo, que creí conveniente que este quedara perfecto”, explica Carlos Anibal, quien además de manejar la carrera de su hijo es quien produce y compone sus canciones.

A los 7 años Capulí ya formaba parte de festivales interescolares de canto. “Al principio me daba un poco de nervios, pero después me soltaba en el escenario”, manifiesta.

De hecho, fue esa seguridad y el buen manejo en la interpretación lo que lo llevó a ganar el primer lugar con el pasillo ‘17 años’ y llevarse los aplausos de sus compañeros de curso.  

Por sugerencia de su padre, Capulí se inclinó por la música nacional. Por ello, de su primer disco se desprendieron temas conocidos como ‘El aguacate’, ’Ángel de luz’, y otros inéditos como ‘Buscando a mamita’.

La grabación del CD guarda una anécdota, “en dos horas grabamos los nueve temas que componen el material. A ratos sentía que ya mi voz no daba, pero lo logramos con el apoyo de mi padre”, señala.

Ahora con 12 y sin la presión del tiempo, Capulí ingresó de nuevo a un estudio para grabar un nuevo álbum, en el que dos de sus canciones giran en torno a los policías.

Desde el año pasado la institución policial se convirtió en su centro de presentaciones, donde llama la atención al aparecer vestido con el traje de gendarme que sus padres le enviaron a confeccionar.

Y aunque Capulí tiene claro que la música es lo suyo, admite que sus frecuentes visitas en los pabellones y en el cuartel lo llevaron a proponerse como meta convertirse en comandante una vez que termine sus estudios. “No pienso dejar la música porque he visto cómo dentro de la institución también hay cantantes, la banda de la Policía. Quiero hacer las dos cosas a la vez”, dice.

Además de los temas a los uniformados, según Capulí, dentro del disco existe un tema especial. Se trata de ‘La protesta de los niños’, en el que hace una denuncia en contra del maltrato y la violencia infantil.

ENTÉRATE

Su segundo material, que tiene como nombre ‘Capulí, el niño cantor’, tiene dos temas dedicados a la institución policial: ‘Soy policía nacional’ y ‘El policía de honor’.

Su padre Carlos Anibal, quien maneja su carrera, adelantó que prepara para los próximos meses una gira por Venezuela.