Si hasta hace algunos años Axl Rose brillaba por la polémica que levantaba su actitud en los escenarios, hoy suscita controversia por expresar sus opiniones políticas contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en concreto.

Axl ha publicado, en los últimos meses, desde su perfil en Twitter, sus intensos puntos de vista políticos con quienes lo siguen. La cifra es de 1’200.000 seguidores, y el 4 de julio (celebración de la independencia en EE.UU.) arremetió contra el cirujano general Jerome Adams, quien sirve como líder de los servicios de salud de ese país.

La crítica se dio por una respuesta de Adams en televisión sobre las recomendaciones a los ciudadanos en el contexto de la pandemia. El artista le exigió que fuera más claro. Y otro antecedente es que, cuando Trump estaba en campaña, Axl Rose le recordó que no autorizaba el uso de su música en mítines.

Ahora, el vocalista de Guns N’ Roses ha defendido sus recientes publicaciones, afirmando que vienen de “un sentido de enojo, obligación y responsabilidad”.

Desde el inicio de la gestión de Trump, el cantante ha repetido que se avergüenza del mandatario y hoy reafirma que su desdén se debe a que lo que percibe como “amenaza a la democracia”; no es secreto. “Mis publicaciones políticas y sociales no son sobre mí. Son sobre los problemas”, ha reiterado, a la vez que aclara que guardar silencio sería una forma de complicidad frente al Gobierno.

Él, el guitarrista Slash y el bajista Duff McKagan ya están componiendo, y esperan retomar la gira que los traería a Ecuador el sábado 21 de noviembre.

La empresa One Entertainment, responsable del evento, ha señalado que “los tickets son válidos aunque aún no hayan sido canjeados” y que la fecha acordada con la banda está sujeta a las disposiciones que dicten las autoridades.

Las entradas para la localidad Preferencia del Estadio Olímpico Atahualpa (31.000 espectadores) se agotaron en marzo pasado. (I)