Amy Adams y su encanto natural a lo Luisa Lane
¿Es un pájaro? ¿Es un avión? No, es Amy Adams, que encarna a Lois Lane (Luisa Lane) en ‘El hombre de acero’ (Superman) y que en los últimos años ha dado qué hablar en Hollywood por sus diversos y destacados papeles en la pantalla grande con los que ha conseguido cuatro nominaciones al Oscar como Mejor Actriz Secundaria.
Este viernes engalanará las pantallas de cine del país con el estreno de la última película en la que Superman vuelve a salvar el mundo en una historia de ficción que por años ha cautivado a grandes y chicos.
Ya los críticos señalan que Adams es la actriz que mejor ha interpretado a la considerada como ‘eterno amor’ del superhéroe, lo cual habría que juzgar cuando usted se siente frente a la pantalla y lo vea con sus propios ojos.
Mientras tanto, lo que no se puede negar es la sencillez y el carisma de esta actriz nacida en Italia en agosto de 1974.
Recientemente concedió una entrevista a una conocida revista europea, en la cual admitió llevar un estilo de vida demasiado “sosegado” en comparación con los estereotipos que rigen en la industria del cine, por lo que reconoce que le gustaría protagonizar -“al menos uno”- un escándalo público para “ver lo que se siente”.
A la actriz le gustaría ser la típica artista que provoca escándalos en los sets de rodaje y que se destaca por comportarse con arrogancia ante sus subordinados, una actitud que se abstiene de desplegar porque entiende que no está en su naturaleza y porque sabe que no tardaría en arrepentirse de sus malos modos.
Adams confesó que si se mostrara irrespetuosa con alguno de sus compañeros, pronto acudiría a disculparse ante cada uno de ellos al sentirse profundamente avergonzada. “Me encantaría ser una diva, pero sé que luego iría dejando notas a mis compañeros pidiéndoles perdón por mi lamentable comportamiento, ya que esa no es mi forma de ser. Yo soy educada, siempre digo por favor y gracias y creo en los buenos modales”, dijo la artista a la edición británica de la revista ELLE.
La actriz, de conducta intachable, reconoció también que durante su infancia en Castle Rock (Estados Unidos) era una niña excesivamente tímida que carecía de popularidad en el colegio, una situación de soledad que afectó sobremanera a su autoestima y reafirmó su inseguro carácter.
“Odiaba el instituto. Era la típica chica solitaria que se leía un libro mientras comía. Solía estar siempre de mal humor y me costaba mucho relacionarme con los demás. Para cumplir mi sueño de ser actriz tuve que desprenderme de todas esas inseguridades, y reconozco que fue una labor titánica que me exigió mucho esfuerzo”, se sinceró la popular estrella de cine. “Tuve que dejar a un lado mis miedos para poder ponerme delante del público, y eso no es nada fácil cuando no has sido una persona especialmente sociable”, apuntó.
Parece que la timidez inherente a la personalidad de Amy ha sido heredada ahora por su hija Aviana, a quien tuvo hace dos años con su prometido -el también actor Darren Le Gallo- y quien no disfruta en absoluto con el exceso de atención. “Es divertido ver cómo se pregunta: ‘¿Por qué todo el mundo me sonríe?’. Yo siempre le respondo que es porque hace felices a los demás, pero ella siempre me contesta: ‘¿Puedes decirles que paren?’”, bromeó la estadounidense.
Lo cierto es que su labor titánica de alejarse de sus inseguridades no fue en vano, ya que en sus inicios en el teatro obtuvo papeles principales para luego, en 1999, debutar en el cine en la comedia negra ‘Muérete, bonita’.
Después de una serie de apariciones especiales en televisión y papeles en películas de serie B, consiguió el rol de Brenda Strong en ‘Atrápame si puedes’ (2002), pero su primer papel importante fue en la película independiente ‘Junebug’ (2005), donde interpretó a Ashley Johnsten y por la que recibió elogios de la crítica y una nominación al Oscar a la mejor actriz de reparto.
En 2007 Adams protagonizó la cinta de Disney ‘Encantada: La historia de Giselle’, donde desempeñó a Giselle. En este mismo año actuó en ‘The Ex’, y en 2008 forma parte del elenco del filme ‘La Duda’ como la hermana James; por esta película fue candidata al Oscar por segunda vez.
También en este periodo apareció en la exitosa serie ‘The Office’ como Katy la prometedora pareja de Jim Halpert, interpretado por John Krasinski.
En 2009, Adams actuó junto con Ben Stiller, Owen Wilson y Robin Williams en la secuela de ‘Una noche en el museo’, donde desempeñó a Amelia Earhart, la legendaria aviadora estadounidense, célebre por sus marcas de vuelo y por intentar el primer viaje aéreo alrededor del mundo sobre la línea ecuatorial.
Para este mismo año tuvo un papel protagónico en ‘Julie & Julia’ como Julie Powell, y su co-protagonista fue Meryl Streep.
En 2010, actuó en la película ‘Leap year’, desarrollada en los hermosos paisajes de Irlanda, junto al inglés Matthew Goode, donde fue icono de glamour y belleza incomparable, confirmando ser una de las pelirrojas más hermosas de Norteamérica.
Con su personaje de Charlene Fleming en ‘The Fighter’ consiguió otra nominación al Oscar en 2011 y el año pasado volvió a compartir créditos con Philip Seymour Hoffman en el drama ‘The Master’, dirigida por Paul Thomas Anderson y por la que recibió su cuarta nominación al Premio Oscar como Mejor Actriz Secundaria.