El gusano informático cifra los datos de la empresa
Un virus pedía hasta $ 500 como recompensa
En 2015 un virus denominado ‘cryptolocker’ ingresaba a las compañías a través de un correo electrónico que traía un asunto atractivo. Cuando el colaborador abría el mensaje, se infectaban automáticamente todos los equipos de la empresa. Este virus cifraba los datos y pedía una recompensa que oscilaba entre los $ 300 y $ 500. Pero, a pesar de entregar el dinero, era imposible garantizar la restitución de la información robada por los ciberdelincuentes.
Los expertos de la empresa GMS, dedicada a la cyberseguridad, recalcan que las últimas versiones de ransomware (programa informático que restringe el acceso a los archivos del sistema infectados, y pide un rescate a cambio de quitar esta restricción) pueden ser utilizadas por cualquier persona sin que requiera un alto conocimiento informático. Y eso puede generar cuantiosas pérdidas tanto a nivel económico como estratégico de la compañía, cuando utilizan la información robada para venderla a la competencia.
Jaime Guañuna, jefe de Servicios de GMS, explica que los hackers descubren las debilidades de un computador, o de una red informática. A través de esta vulnerabilidad logran acceder al equipo o al grupo de equipos motivados por diferentes razones: fines de lucro, reconocimiento personal o simplemente por hacer daño a la organización.
Hay una serie de acciones de riesgo para que la compañía se infecte con estos virus. Por ejemplo usar un dispositivo de almacenamiento (pendrive) sin los cuidados del caso, escribir mensajes en las redes sociales, reenviar documentos a través de una cuenta personal, abrir correos de ofertas y descargar contenidos irrelevantes. Las empresas dejan de lado la cyberseguridad, pero enfrentar un ataque de este tipo es mucho más caro que prevenirlo. (I)