La tienda de Apple ubicada en la zona céntrica de la capital francesa, sufrió la noche del 31 de diciembre un atraco a manos de un grupo de enmascarados que portaban armas y que accedieron al lugar poco después de la hora de cierre.

Las personas armadas lograron huir antes de que la Policía se presentara en el lugar del atraco. Según las primeras estimaciones, el valor total de los objetos sustraídos podría superar el millón de dólares.

Cuatro encapuchados fuertemente armados consiguieron ingresar a la tienda que la marca tiene abierta en la zona de la Ópera, en el bulevar Haussman.

Para perpetrar el delito, los delincuentes aprovecharon el momento en que los policías  se encontraban cubriendo los Campos Elíseos debido a la festividad de año nuevo.

Todavía  no se ha determinado de manera oficial la cantidad de dinero equivalente a  los artículos que fueron sustraídos, pero en el botín obtenido por los malhechores constan, entre otros productos, dispositivos móviles, tales como iPhone y iPad, que pueden alcanzar un alto precio en el mercado negro.

El acceso a la tienda fue a través de la puerta de servicio cuando procedía a abandonar el local un empleado de la limpieza, quien fue inmovilizado junto al vigilante mientras los encapuchados procedían a llevarse los dispositivos para después meterlos en una furgoneta y posteriormente huir por el mismo lugar por donde ingresaron.

En los videos de las cámaras de  la seguridad de la empresa se muestra que no hay señales de forcejeo de otras puertas del local. Tampoco se ve desorden en la tienda, lo que lleva a la conclusión de que los cuatro malandrines conocían cada parte del local.

El gerente de la tienda de Apple indicó que revisará el inventario para dar a conocer a cuánto asciende el perjuicio.

Esta no es la primera vez que la empresa fundada por Steve Jobs es atracada en grandes cantidades. En noviembre del año pasado 3.600 mini iPads procedentes de China desaparecieron directamente del aeropuerto de JFK de Nueva York.

Se entrevistó a varias personas que trabajan ahí, pero no se encontró ningún sospechoso. El valor estimado de esa mercancía era de 1,5 millones de dólares y su entrega estaba prevista para el día siguiente de su arribo.