La empresa de Cupertino traspasó su producción de pantallas y chips a Sharp, una medida coherente al lío  legal con la coreana Samsung.

La compañía que lidera Tim Cook tendrá como nuevo proveedor al centro de Sharp para desarrollar exclusivamente pantallas de iPhone y iPad, según recoge Bloomberg.

Supuestamente  Apple tuvo que invertir millones para poder desarrollar dichas pantallas y asegurar los paneles para sus dispositivos.

El nexo comercial de la firma de la manzana cesa con Samsung luego de que la firma asiática demandara a Apple en los países bajos por el uso de sus patentes de tecnología 3G en los iPhones y en los iPad.

Por su parte Apple demandó a Samsung por copiar el estilo y diseño de su iPhone y iPad para la línea Samsung Galaxy.

Ahora, fuentes cercanas a la compañía Samsung han admitido que se tratará de un duro golpe económico para ellos debido a que en los últimos años se han dedicado a construir pantallas y chips para los dispositivos de Apple.

Pero Sharp se encuentra entusiasmada con su nuevo proyecto y más porque serán los encargados de realizar los paneles LCD para la tercera generación del iPad, el cual se espera que esté disponible en el 2012. Con esta medida, Apple reduce su dependencia de su principal rival en el mercado de tabletas y celulares.