Los  robots, computadoras con luces de neón y mensajes incesantes en Twitter son parte del escenario en el que se mueven los 2.000 “campuseros” que han llegado hasta la Mitad del Mundo para intercambiar experiencias y conocimientos.

En el centro de exposiciones Cemexpo no se sabía si era  día o noche. Los participantes escuchan talleres de robótica, música o astronomía, se retan en videojuegos o descargan miles de bits a una velocidad de navegación  3G.

Los “geeks” informan en Facebook y  Twitter, donde el tercer tema más popular en las redes sociales en Ecuador es Kevin Mitnick, un pirata informático convicto y reformado que llegó a ser uno de los objetivos principales de la unidad de delitos informáticos de la Oficina Federal de Investigaciones de EE.UU. (FBI, por su sigla en inglés).

El estadounidense fue el plato fuerte de la jornada de los "campuseros", alguno de los cuales tal vez se quede pensando esta noche en su tienda de campaña, donde duermen en una sala contigua a la de las reuniones, que su computador y teléfono móvil son muy vulnerables a ser atacados por alguien con un ingenio malvado.

Mitnick socavó uno de los temas que actualmente inundan las revistas de informática: la "computación en nube".
Consiste en que las empresas o entidades trasladen sus contenidos y programas a servidores externos, con lo que se ahorran el mantener su propia infraestructura informática, pero se trata de un mecanismo complejo, "que genera problemas de seguridad", advirtió Mitnick.

Afirmó en una rueda de prensa que él logró violar las cortapisas y acceder a datos privados en la "nube" de una empresa que le había contratado de un país de la región, que no reveló, en tan solo 24 horas.

También ofreció un consejo básico para la persona común: pensar en las contraseñas que uno escoge, pues la mayoría de la gente usa claves iguales o similares en varias páginas o programas, lo que tildó de "un gran error".

A un pirata informático le bastaría encontrar una de esas claves en algún lugar de la red para tener acceso a la vida de cualquiera, por lo que Mitnick recomendó emplear un programa denominado administrador de contraseñas, el cual las cambia automáticamente.

También aconsejó usar el correo electrónico Gmail y el buscador Google Chrome, porque a su juicio ofrecen más seguridad, así como actualizar las aplicaciones en el computador, ya que las versiones antiguas son más susceptibles a contener los "agujeros" por los que entran los "hackers".

Los "campuseros" también tuvieron la oportunidad de asombrarse con las demostraciones de robótica, como peleas de sumo, carreras, robots bailarines y androides que imitan los gestos humanos.

"Reciclamos materiales antiguos, de televisiones, de radios, sacamos materiales y de eso armamos los robots. Así protegemos también el medioambiente", dijo Mauricio Pazmiño, del club de robótica de la Universidad Politécnica Salesiana de Ecuador.

La experta en robótica Doris Bautista les explicó los últimos avances, como máquinas que con sus gestos "enseñan a interactuar a niños autistas" o mantienen un diálogo con un anciano solitario.

Al mismo tiempo, los robots soldado ya han dejado de ser ciencia ficción y los hay que pilotan aviones, transportan armamento y disparan a discreción, expuso Bautista.

La música es otro ámbito que se ha transformado con la revolución de Internet y que ha hecho que el éxito o fracaso de una banda ya no dependa exclusivamente de los intereses de las discográficas.

"Hemos pasado de la era de la información para entrar en la era de la recomendación", dijo Diego Granja, propietario de planarteria.com.

Las redes sociales permiten a los grupos independientes un contacto con su público, que ya no solo está expuesto a productos masivos o "hits" que se transmiten en programas con una buena audiencia, según Granja.

Pero como en todo, las nuevas posibilidades entrañan también nuevos peligros. Javier Duro, quien creó la cuenta de Twitter del periódico español ABC, dictó un seminario sobre cómo evitar hundir a una empresa en 140 caracteres, los que entran en un tweet en esa red.

Lo importante, a su juicio, es no dejar la tarea en manos de una sola persona, sino de un equipo, y saber rectificar a tiempo.

Así se señaló la manera en que se  manejan las cuentas de Twitter de medios de comunicación  de Estados Unidos como The New Yor Times, CNN, BBC, entre otras cadenas de información.