Los especialistas creen que estos dispositivos ayudarán a las agencias espaciales
Microsoft mira hacia el futuro con sus nuevos lentes HoloLens
Con sus gafas futuristas HoloLens, a medio camino entre los lentes de Google y el casco de realidad virtual Oculus, Microsoft demuestra el potencial de las nuevas tecnologías a la vez que su capacidad para sorprender al mercado.
El prototipo presentado por el gigante estadounidense del software, propone una ‘realidad aumentada’: los lentes dejan ver el mundo real, pero acompañado de hologramas.
Durante una videollamada, una ingeniera “me guió para cambiar un interruptor eléctrico. Ella podía dibujar líneas y flechas para indicar cosas, las herramientas que debía tomar o el lugar donde cortar los cables”, cuenta Carolina Milanesi, una analista de la firma Kantar Worldpanel que probó el HoloLens.
Ahora, ella imagina que puede utilizar este dispositivo para ayudar a los niños a hacer sus tareas o hacer diagnósticos o dar apoyo técnico a distancia.
Para este tipo de usos, Microsoft cooperará con la agencia espacial estadounidense: los HoloLens deben ‘teletransportar’ a los científicos de la Nasa sobre Marte junto al robot Curiosity.
“Es el futuro de la exploración espacial”, afirmó uno de ellos durante una demostración.
Jack Gold, presidente de la empresa de investigación tecnológica J. Gold Associates, observa el uso de los HoloLens para diseñar un objeto y luego imprimirlo en 3D.
En este punto el objeto impreso “no es tan útil, pero imagine una empresa que deba producir una pieza de repuesto. O en el dominio médico, una prótesis de rodilla. Es el tipo de cosas que veremos en algunos años”, predijo Gold a la AFP.
Nueva frontera informática
Algunos como Frank Gillett, de la firma Forrester, evocan una revolución en la tecnología. “HoloLens ofrece una nueva plataforma y una experiencia informática a escala de la primera PC y del lanzamiento del iPhone”, afirmó en su blog después de probar el aparato.
“No sabemos adónde irá el futuro de la realidad virtual, del 3D y la imagen holográfica”, opina Gold. “Esto va a cambiar enormemente la manera en que la gente interactúa con los computadores”.
“Pero eso no ocurrirá rápidamente ni sin dificultades”, observó.
Prueba de ello son los lentes interactivos de Google, que suspendió su venta luego de que no recibieran gran acogida de los consumidores, que los juzgaron demasiado costosos y que atentan contra la privacidad por su cámara integrada.
Este resultado no disuadió a las firmas tecnológicas de querer ampliar la visión de los consumidores. Además de la experiencia con Glass, Google compró la ‘startup’ especializada en la realidad aumentada Magic Leap.
Como parte de los defensores de la realidad virtual, Facebook invirtió $ 2 millones en Oculus, que trabaja en un prototipo de casco (Oculus Rift) y una versión adaptable para los teléfonos inteligentes de Samsung (Gear VR).
Sony tiene su propio proyecto, Morpheus, para su consola de videojuegos PlayStation.
“La realidad aumentada es la forma como esta tecnología tocará al gran público”, agregando información útil al mundo real. Por ejemplo, un turista podrá ver en directo la historia del lugar que visita o las críticas de los restaurantes donde quiere comer.