Lola, aquella mujer que libra en Twitter una batalla a Cienfuegos
Una mujer con un torso que llama a la sensualidad, pero que nunca muestra su cara, es el avatar de Lola Cienfuegos, una twittera con más de seis mil seguidores, que también es la guerrera más polémica de la tuitosfera nacional. Su identidad es un secreto. Sus armas son sus tweets, sus argumentos y su singular personalidad. El terreno de batalla o, mejor dicho, de debate es el “time line” y el tema que prefiere, la política ecuatoriana.
¿Alguna vez hackearon su cuenta de Twitter?
Nunca hasta aquí (toco madera). Sí han tratado muchas veces de hacerlo en Twitter y en mi blog.
Es verdad que el conocido hackeo de su cuenta no existió y que solo se trató de “autohackeo”.
Fue en realidad un experimento en el que involucré a mis seguidores y aquellos quienes, supuestamente, me tienen bloqueada; varias cuentas de Anonymous y miles de twitter@s que ni siquiera tenía idea que existían. Sin ser presumida, pero en número llegaron casi a cien mil.
¿Cuáles fueron las razones que la impulsaron a hacer esta maniobra?
Se me ocurrió el 14 de marzo. Ese día puse un tweet dedicado a mis followers “nerds” y “geeks”, donde bromeando los felicitaba por el día Pi. Luego recordé que días atrás, dos cuentas de Anonymous, una de ellas de México, se confabularon para “doxearme” la cuenta por pedido de twitter@s ecuatorianos. Decidí investigar dichas cuentas y los tweets de los “pedidos” para hackearme.
Decidí twittear que mi cuenta había sido “intervenida”. Entonces, firmé el tweet como Anonymous y puse el link al tweet de las dos cuentas que habían decidido doxearme.
Ello desató la locura entre mis lectores; júbilo de aquellos que creían que “al fin lo habían logrado”. La cosa se puso más fácil para mí cuando el grupo Anonymous de México se atribuyó el “hackeo” y yo desde mi cuenta les hice RT.
Varios grupos de Anonymous de fuera de Ecuador también retwittearon la “noticia”. En ese momento los twitteros ecuatorianos se involucraron de dos maneras: los que felicitaban a Anonymous y los que reclamaban por mi “hackeo”.
Cambié mi avatar y me puse una foto con una cara de Anonymous. Todo era como un acto teatral para mí. En ese punto decidí consultar (como Anonymous) a todos si deseaban saber mi identidad o no y si querían que liquide esa cuenta.
Las miles de respuestas se dieron en diferentes hashgtags y mentions. Es ahí que pude comprobar el doble discurso de la mayoría de twitteros “políticos” y “libertarios” que abogan por la “libertad de expresión”, pero que rogaban para que se revele mi identidad o se elimine mi cuenta.
Me contacté con otros grupos de Anonymous que me revelaron que habían recibido ofertas de dinero de estos mal llamados “libertarios” para hacerme el “hackeo”.
Por último fijé una fecha donde se iban a dar los resultados a una hora específica: marzo 17 a las 13:00. El experimento duró 4 días.
Ese día y a esa hora, ya con mi avatar original, puse este tweet: “mi experimento al que concurrieron centenares de miles de twitter@s ha llegado a su fin. Hay varias lecturas. Saquen las suyas”.
Sobre el resto he dejado para que elaboren sus propias opiniones. Diario El Comercio (con dos noticias) y El Universo con un editorial también han manifestado las suyas, sin pedirme la mía.
¿Cómo cataloga al Twitter de Ecuador. Considera que es una herramienta de debate político?
Twitter es lo que un@ quiere que sea. Hay el limitante del número de caracteres, pero eso causa que seamos más precis@s con nuestras ideas. Trato de balancear a quienes sigo, me gusta que tengan diferentes ideologías, afinidades políticas o filosofía. En la variedad está el gusto.
Hay quienes dicen que a los twitteros nacionales no les interesa la política, sino la farándula y el deporte, pero ¿cómo definiría al twittero ecuatoriano?
Es muy difícil tratar de ponerle una etiqueta al twittero ecuatoriano. Hay de todo como en la vida real. La farándula y el deporte, sí; pero la política tiene también su espacio y hay una marcada lucha twittera entre anticorreístas y correístas, que muchas veces llega al fanatismo.
Lo mío es el sarcasmo, la ironía, la gozadera y me aprovecho muchas veces de esas “debilidades”. Llevo cuatro años con mi cuenta Twitter. Luego de mi experiencia con mi blog, decidí experimentar con esta nueva opción. No tengo Facebook. Mi esposo tiene Facebook por cuestiones de su trabajo y mis hijos por la novelería facebookera.
En Twitter, Lola Cienfuegos es popular por generar polémica. ¿Esto es parte de una estrategia para ganar popularidad en Twitter o se trata de una forma de propiciar debate?
No es estrategia. Me gusta y me buscan para debatir. Muchas veces me llegan RT (retuits) que les han hecho a ellos. Veo que están equivocados y debato. Con Janeth Hinostroza he tenido varios debates, nos seguimos e intercambiamos DM, pero en el fondo nos respetamos. Es muy buena periodista, pero lastimosamente tiene que aprender a separar su oficio de su anticorreísmo, que la hace caer en ciertos errores en Twitter.
Con Carlos Andrés Vera también he tenido varios debates. Él está en una postura incómoda por ser hijo del anticorreísta Carlos Vera y eso lo ha hecho caer en tweets difamadores. Es un chico inteligente que ha sabido rectificar cuando le he hecho notar sus errores; pero tiene su bichito metido conmigo. Yo lo comprendo.
Ha tomado una fijación con el tema “Correa”, se acuesta y se levanta pensando en él. Puede variar más su temática, ya que es muy bueno en sus trabajos como director.
¿Por qué el anonimato?
Porque es permitido. No es ilegal y es una opción que me permite despojarme de cualquier ego que pueda tener en la realidad. No soy nadie siendo anónima. Soy mis tweets.
Tengo la responsabilidad interior de no usar mi anonimato para difamar o injuriar a nadie. Soy dura y sarcástica, eso sí, pero también soy sensible y he ayudado a muchos en diferentes aspectos. Suelo pendejear a muchos que se lo merecen por ser pendejos, pero no llego al insulto bajo ni vulgar.
¿Cuál es la ideología política de Lola Cienfuegos?
Me considero, en primer lugar, un ser humano del planeta Tierra. Quisiera que no existan fronteras y que podamos movernos sin pasaportes o identidades de papel. No soy nacionalista, ni chauvinista, ni regionalista.
Voté por Rafael Correa y considero que ha sido un buen presidente, pero podría hacer un mejor Gobierno. Tiene sus defectos como toda persona, pero sus virtudes y su gran trabajo social en salud, educación y cultura, sus obras, hacen que siga teniendo esperanza en que pueda seguir fijando el rumbo de bienestar para nuestros futuros nietos.
Hay mucha oposición empeñada en hacer que todo fracase, en lugar de remar para el lado del progreso y al cambio de esas caducas prácticas que tuvimos que sufrir antes de Correa.
¿Por qué eligió ese avatar y su nombre de usuario?
El avatar sin ser vulgar es provocativo. Estoy de espaldas como diciendo que no me interesa mostrar una cara bonita. Estoy para difundir mis ideas. Sobre el “username”: mi nombre real es Lola y el Cienfuegos lo adopté cuando escribía y comentaba en blogs de extrema derecha que aparentaban ser libertarios. El Cienfuegos suena a “comunista” y eso saca de casillas a los fanáticos derechistas. Y luego ya me gustó.