Cada enero y como ocurre desde hace 40 años, las Vegas recibe a miles de expositores y emprendedores tecnológicos en la llamada Feria de Tecnología CES (Consumer Electronics Show). Esta vez llegaron más de 3.600 compañías que mostrarán un total de 20 mil inventos, prototipos y novedades listas para salir al mercado. Se esperan 150 mil visitantes en un espacio equivalente a “50 canchas de fútbol norteamericano”.

Este 2016 la industria de los móviles, televisores 4K y las tabletas no es ajena a la coyuntura económica, y si bien los aparatos móviles siguen en el corazón de los gastos mundiales, se estima una caída en sus ventas debido al dólar fuerte y la desaceleración económica china.

La asociación estadounidense de tecnologías para el gran público (CTA) y la firma de investigación GFK estimaron que los consumidores de todo el mundo gastarán cerca de $ 950.000 millones en 2016 en teléfonos, tabletas, televisores, computadoras, cámaras fotográficas y videojuegos. De cumplirse esta predicción, representaría una caída de 2% respecto al año anterior, cuando el total alcanzó $ 969.000 millones.

Steve Koenig, un analista de la CTA, destacó en una conferencia de prensa que el “dólar fuerte” pesó en las conversiones de los montos gastados en el extranjero. En términos de unidades, las ventas debían ser “más estables” este año.

También se hará sentir la desaceleración del crecimiento en China, así como la caída de los precios de algunos productos estrella, principalmente los smartphones, que deberían vender una media de $ 283 millones este año, un bajón del 7%. Si se suman las tabletas y las computadoras portátiles, estos tres tipos de pantallas móviles deberían representar 58% de los gastos mundiales este año.

Pero Steve Koenig se pregunta cuánto tiempo sobrevivirá este ‘triunvirato’ y señala que las tabletas corren el riesgo de quedar estranguladas entre las laptops convertibles y los smartphones que son cada vez de mayor tamaño.

¿Qué viene después para el mundo tecnológico? Precisamente la feria CES de las Vegas, que empezó ayer, es el momento oportuno para conocer cómo se moverá el futuro de la industria.

La próxima ola de crecimiento la protagonizarían los equipos con realidad virtual y aumentada, los televisores de ultra-alta definición (4K), accesorios usables conectados (‘wearables’), además de relojes y drones.

Una de los principales actores de la realidad virtual, la firma estadounidense Oculus (filial de Facebook), espera comenzar a recibir el miércoles las órdenes de compra de su muy esperado casco Oculus Rift, anunció la empresa.

Televisores más delgados

Ante los avances de Netflix y otras cadenas de contenidos online, las marcas de televisores no quieren perder terreno. Buscan que los usuarios los consideren como el complemento a la hora de ver programas en línea.

El grupo surcoreano LG abrió el día de conferencias de prensa en el CES al develar un nuevo modelo de televisor que no supera el grosor de cuatro tarjetas de crédito apiladas. Con sus 2,57 mm de grosor, el panel tiene una medida sin precedentes, dijo en la presentación el vicepresidente de mercadeo David VanderWaal.

Horas más tarde su competidor Samsung presentó un aparato de televisión que sirve además como centro de control de domótica para viviendas automatizadas. El alto ejecutivo de Samsung Electronics Hyun Suk Kim corrió el velo de los nuevos SUHD Quantum Dot que, según él, marcan “el inicio de una nueva era en la televisión”.

Estos modelos están diseñados para consolidar mejor el contenido tradicional y en línea y permiten jugar más de 500 videojuegos, entre ellos ‘Assassin’s Creed’, que se difunde en línea en sociedad con el servicio Sony PlayStation Now, sin necesidad de una consola.

Tecnología para sentir y usar

El año pasado el reloj inteligente de Apple y Fitbit, un dispositivo reloj, fueron los accesorios usables conectados o ‘wearables’ más cotizados. Pero a medida que la tecnología avanza, las empresas se enfocan en crear otros productos.

Se espera que en el CES, Samsung presente un cinturón inteligente de cuero, que sirve para controlar el peso de una persona a través de la cintura; es decir podrá enviar una señal cuando el usuario aumente la circunferencia de su barriga. También detecta cuántos pasos camina una persona al día y cuánto tiempo permanece sentado. La firma surcoreana también renovó el modelo de su Smart Watch Gear y le añadió el término S2.

El equipo será compatible con el sistema iOS de Apple y también de Android. Esto cambia la dinámica de la compañía, pues permitirá que usuarios del iPhone se conecten con el reloj. El dispositivo tiene procesador Exynos 3250 a 1GHz, 512 MB de memoria RAM, 4 GB de almacenamiento no ampliable, NFC para utilizar Samsung Pay y una pantalla de 1,2 pulgadas. El precio de esta nueva colección no ha sido desvelado, pero se ha dicho que llegará al mercado el próximo febrero.

Sin duda los objetos más tradicionales y cotidianos, como el cinturón o el reloj, serán las estrellas del CES. A esto se añaden las aplicaciones que permiten mantener una buena salud y contar caloría.(I)