Jhonny Uchuari, un volante chiquito, pero peligroso
En la cancha resalta por sus zapatos naranjas. Sus pupos son del mismo color que los del astro de Barcelona, Lionel Messi.
“Admiro a Messi por su juego y porque es de baja estatura como yo. Espero imitar algunas cosas que él hace en la cancha en este Sudamericano”, afirmó el volante de la selección Sub 17, Johnny Uchuari, que hoy (18:00) jugará frente a Paraguay en el hexagonal final.
El lojano se convirtió a sus 14 años en uno de los jugadores más jóvenes en debutar en primera categoría, en 2009, cuando Liga de Loja disputaba la Serie “B”.
“Llevo dos años entrenando con el equipo principal y ahora, cuando regrese al club, espero poder jugar en la A”, comentó el jugador que cumplió 17 años en enero.
Pero ahora se preocupa por hacer un buen Sudamericano y disputar el Mundial de la categoría en México (junio-julio).
“Ninguno va a decir lo contrario, que no está ansioso de poder jugar el Mundial. Empezamos con un empate y ahora los tres puntos son necesarios para mantener la esperanza”, dijo.
“Pipiolo”, como lo conocen desde los 12 años, se desenvuelve tanto por izquierda como por derecha. En los partidos cambia de posición continuamente con Junior Sornoza, el 10 de la “Mini-Tri”.
Desde los ocho años empezó a jugar en su barrio Sauces Norte, en su ciudad natal, en las ligas barriales que ahí se desarrollaban. Después los directivos de la “Garra del Oso” se interesaron en su juego y de inmediato lo contrataron.
A la “Tri” llegó a los 14 años para jugar en la Sub 15. “Varios compañeros nos conocimos ahí y seguimos en el proceso. Por eso sabemos lo que podemos dar y espero que mostremos un mejor nivel en los partidos que faltan”.
El apelativo “Pipiolo”, que significa principiante, novato, inexperto o niño, surgió de un padre de familia que lo llamó así cuando jugaba en la Sub 12. “Me quedé con ese apodo y todos me conocen de esa forma. Me caracteriza”, comentó Uchuari.
Sin embargo, con la experiencia que ha logrado, en poco tiempo ha dejado de ser un novato en la cancha.
“Uno siente un poco de nervios, pero eso pasa en los primeros minutos. Trato de que no suceda en jugadas clave, que pueden cambiar un partido”, añadió el volante.
Su hermano mayor, Luis, de 18 años, también juega en su club e incluso tuvieron la oportunidad de compartir en la cancha cuando la Liga lojana jugaba en la serie “B”.
“Fue emotivo jugar con él, ojalá en el futuro podamos seguir haciéndolo”, comentó.
Uchuari no se cree Messi, pero se refleja en él, no solo en su pinta, sino en su actitud y descaro en la cancha.
En otros partidos Brasil y Colombia abren la fecha.
Por primera vez en el torneo, las selecciones jugarán en la ciudad de Quito, en el estadio Atahualpa.
A las 15:50, Brasil y Colombia disputan el primer partido. Después del choque entre Ecuador y Paraguay, Argentina medirá a Uruguay desde las 20:10.