$ 1.362 millones invirtió el Gobierno en proyectos multipropósito en Ecuador

Alexis Sánchez, secretario nacional del Agua (Senagua), reflexiona sobre los proyectos de infraestructura del país, que han evitado que la fuerza de la naturaleza produzca inundaciones y destrucciones como las que afronta el Perú.  Esto a propósito de la celebración del Día Mundial del Agua, que se recordó el miércoles pasado.

¿Cómo se encuentra Ecuador en el tema del abastecimiento equitativo del agua?

Ecuador es un país privilegiado en recursos hídricos. Tenemos tres veces más que el promedio mundial per cápita. Pero esa gran cantidad no se distribuye equitativamente. En la Amazonía, por ejemplo, se concentra más agua y hay menos población. Por el contrario, en la Costa hay mayor gente y es difícil acceder al líquido.

El país no tiene caudal constante todo el año. Tenemos mucha agua en invierno y muy poca agua en verano.

¿Qué acciones se han tomado para corregir el problema?

La Senagua cuenta con un plan de recursos hídricos. A través de este  se conocieron las necesidades de cada región tomando en cuenta la estacionalidad, la hidrología, población, etc. Con esta base se estableció que en el país se necesitan 170 proyectos multipropósito que deben construirse en 40 años.

¿Cuáles se han ejecutado?

En los últimos seis años se construyeron seis proyectos multipropósito; cuatro de ellos  (Bulubulu, Cañar, Naranjal y Chone) son para controlar inundaciones. El Multipropósito Chone protege Manabí, además de la cuenca baja del Guayas y Cañar.

¿A cuánto ascendió la inversión?

Los proyectos multipropósito (no solo los que sirven para recolectar agua), incluido el Dauvin y el San Vicente costaron alrededor de $ 1.250 millones. Estamos en la ejecución de un séptimo, que se enfoca en la península de Santa Elena y cuesta alrededor de $ 112 millones. Es decir, por estos proyectos estamos invirtiendo alrededor de $ 1.362 millones.

¿Qué resultados se alcanzaron con estas obras?

Hace 25 años había pérdidas agrícolas, de infraestructura y humanas. Si bien es cierto que todavía tenemos inundaciones en Ecuador, las consecuencias han sido mucho menos intensas que en años anteriores. Por ejemplo, en Perú hay una destrucción y muerte por inundaciones. Esos problemas no hemos sufrido en el país, gracias a los proyectos multipropósito.

¿Cuántas personas están beneficiadas con estos proyectos?

Alrededor de 200 mil hectáreas han sido protegidas. Lugares como La Troncal y Chone han sido resguardados en el invierno. Habría alrededor de 400 mil beneficiarios.

Pero Chone se volvió a inundar...

Hemos protegido a Chone del peligro mayor que es el río Grande. Se construyó una presa y tenemos el embalse para este río. Chone se inundó por las lluvias que cayeron sobre la ciudad. Además ahí no existe un alcantarillado pluvial adecuado que pueda desalojar las aguas lluvias. Ahora el caudal es 100 veces menor que el que se generaba por el río Grande que ahora está protegido. El desfogue del agua es tarea de todos, no solo de la autoridad que debe construir los multipropósito, sino de los gobiernos seccionales.

¿Dónde se ejecutarán los siguientes proyectos?

Al momento tenemos alrededor de 14 proyectos a nivel de diseño definitivo. Estos se encuentran en  Río Verde (Esmeraldas) y Tumbabiro (Imbabura). Luego está el proyecto Jama-Coaque (Manabí); Pampas de Salasaca (Tungurahua); Tahuín (El Oro) y Puma (Azuay).

La idea es cubrir todo el territorio desde una perspectiva de democratización del agua. En los próximos 5 a 6 años se haría una inversión similar a la de los pasados seis años.

¿Qué proyectos se ejecutaron para dotar de agua a las zonas afectadas por el terremoto?  

Antes del terremoto, la mitad de la población no tenía acceso al agua por red pública. Si bien esa realidad se dificultó con el terremoto, el Gobierno Nacional brindó atención humanitaria. Les dotamos de albergues con agua para que los compatriotas tengan en lo posible una vida digna.

¿Cuál ha sido la inversión hasta el momento?

Ha sido alrededor de $ 1.200 millones para atender a la población. Hemos construido sistemas de agua potable. Recordemos que se estimó que el costo de la reconstrucción  ascendía a $ 3.300 millones.

¿Cuál su expectativa sobre el cambio climático?

Sobre este escenario estamos pendientes permanentemente. El cambio climático se muestra con evidencias más y peores. En el sector hídrico, la consecuencia de este fenómeno se expresa con inviernos más fuertes, con mayor probabilidad de inundación, de destrucción y veranos mucho más secos, lo que también genera una serie de problemas agrícolas, humanos. (I)