El gobierno de Uruguay anunció este miércoles que regulará la creación de un nuevo tipo de comercio para vender marihuana legal producida bajo su control, luego de que algunas farmacias dejaran de ofrecer la droga por trabas bancarias.

El gobierno tiene "la posibilidad de reglamentar establecimientos de expendio exclusivos de cannabis, que garanticen las mismas condiciones de seguridad, controles de calidad y aspectos sanitarios que las farmacias, pero adaptados al uso del dinero en efectivo", dijo el prosecretario de la Presidencia, Juan Andrés Roballo.

El funcionario presentaba así la posibilidad que encontró el Ejecutivo de Tabaré Vázquez para solucionar un problema imprevisto en la implementación de la ley de Regulación del Cannabis, que permite que desde el 19 de julio pasado las farmacias del país vendan marihuana de uso recreativo a consumidores registrados.

Los bancos uruguayos, incluido el estatal Banco República, dejaron de habilitar cuentas de las 16 farmacias que venden marihuana legal, debido a trabas impuestas por la legislación vigente en Estados Unidos, que dificulta sus propias transacciones con instituciones intermediarias si operan con vendedores de algún tipo de drogas.

Con 13.500 consumidores registrados, una cifra en constante aumento, el gobierno se encontró con un problema de difícil resolución, en un país en el que se lleva adelante un proceso de "inclusión financiera", según el nombre otorgado por las autoridades, que supone el pago de todos los salarios por vía bancaria.

La limitación hizo que algunas farmacias decidieran abandonar la red de ventas y el suministro a los consumidores en el marco de la ley aprobada en 2013, se vio dificultado.

El Ejecutivo prevé una alternativa a las farmacias, "un formato de establecimiento que permitirá una mayor agilidad y no estará condicionado por el sistema financiero", explicó Roballo, quien no adelantó detalles específicos sobre el mecanismo.

Popularmente conocida como "la ley de la marihuana", la norma habilita tres formas de acceder a la droga para uso recreativo: el cultivo doméstico o autocultivo, el cultivo cooperativo en clubes y la compra en farmacias. (I)