La tarde de este viernes 6 de noviembre, el Consejo Superior, máximo organismo de la Universidad Andina Simón Bolívar, se reunirá en Sucre para designar al sucesor del rector Enrique Ayala Mora en la sede de la institución en Quito. Él la dirige desde 1997.

Previo al nombramiento, la comunidad universitaria participó de la consulta previa, un proceso no vinculante en el que estudiantes, docentes y trabajadores expresaron su afinidad por uno de los 2 postulantes.

Uno de ellos es César Montaño Galarza, director del Área de Derecho y quien obtuvo su doctorado en la Andina de Quito. El otro es Raúl Vallejo Corral, docente del Área de Letras y Estudios Culturales, exministro de Educación y actual embajador de Ecuador en Colombia.

Vallejo logró su P.hD en Historia de América Latina. Mundos Indígenas, por la Universidad Pablo de Olavide, España.

A pesar de que la consulta previa se ha realizado en años anteriores, la ejecutada el pasado 30 de octubre tuvo un tinte diferente: el reglamento que rige los lineamientos de ese proceso fue reformado en julio de 2015. Esto dio paso a la habilitación de la candidatura de César Montaño, quien participa en el proceso a pesar de que su título de doctorado lo logró en la institución que hoy busca dirigir.

La Ley Orgánica de Educación Superior (LOES), en una de sus disposiciones transitorias, señala que el grado académico de doctorado, exigido como requisito para ser rector o vicerrector de una universidad o escuela politécnica, deberá ser expedido por un centro de educación superior distinto al que se aspira a dirigir.

Por otra parte, en el desarrollo de la consulta, cuyo ganador fue Montaño con 1.218 votos, existió un grupo de estudiantes que no pudo expresar su opinión en una de las 10 urnas.

Es el caso de Xavier Argüello, quien está en proceso de obtener una maestría en Estudios de la Cultura con mención en Literatura Hispanoamericana. Cuando se acercó a la mesa le indicaron que su nombre no constaba. “El argumento que me dieron es que no tenía vigente mi matrícula porque mi tesis está en proceso de evaluación”. Otra de las impedidas fue Carla Iturralde, exalumna. Su nombre no constó en las listas por haber dejado la institución, pero en el conteo final se evidenció el voto de 6 exestudiantes. Además en la consulta previa se registró un ausentismo del 39%.

Antes de la consulta, en la Universidad se vivió un ambiente electoral, aseguró Vladimir Salazar, quien está vinculado a la Andina desde 2004 cuando inició sus estudios en una maestría (en la actualidad cursa un doctorado en Derecho).

Salazar aseguró que recibió cartas de apoyo hacia los 2 postulantes en su correo electrónico y conforme pasaban los días estas subían de tono, al punto de que leyó varios escritos que trataban de desprestigiar a Vallejo. El argumento era su cargo como Embajador.

“No se pueden atacar las ideas. En la Andina se están olvidando de que por un largo periodo dirigió la Universidad una persona que estuvo vinculada a un partido político y eso no fue impedimento para que su dirección fuera acertada”, indicó.

Los tres estudiantes coincidieron en que el perfil de quien dirija la Universidad por los próximos cuatro años debe estar fuertemente ligado al ámbito académico e intelectual, medido por las publicaciones y obras presentadas.

Raúl Serrano, miembro del área de Letras y Estudios Culturales y actual editor de la revista Quipus, agregó que además de la sólida formación, el nuevo rector debe contar con la capacidad administrativa y de gestión para dirigir un centro de posgrados.

Según Serrano, el principal reto del nuevo rector es fortalecer la investigación que se realiza y profundizar los logros que la Universidad ha conseguido en estos años. Uno de ellos es que por segunda ocasión recibió la ‘Acreditación Internacional de Calidad y Excelencia’, por parte de la Comisión Andina de Evaluación y Acreditación.

La Andina es la primera universidad del país en recibir esta distinción que resalta la amplia oferta en programas de posgrado. (I)