Los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut 2011 – 2013) revelan una realidad poco alentadora sobre nuestra manera de alimentarnos. El informe señala que 5558.185 ecuatorianos de entre 19 y 59 años sufren de sobrepeso u obesidad.

El problema también se repite en dos segmentos más de la población. Un 29,9% de menores de 5 a 11 años está con sobrepeso y el 26% de adolescentes entre 12 y 19 años también. (Ver recuadro).

El informe Ensanut, que encuestó a 92.500 personas en el país, tomó en cuenta un cálculo mundial, más conocido como la operación de Índice de Masa Corporal (IMC), para medir el peso o sobrepeso de las personas.

En el IMC, los kilos se dividen para la estatura de la persona, que previamente fue multiplicada por dos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estipula: quienes obtienen más de 25 puntos tienen un cuadro de sobrepeso, pues lo normal sería entre 18 y 24.

Galápagos es la provincia con menos habitantes, pero tiene más personas con sobrepeso, seguida por Azuay, Carchi y El Oro.

Hay un alto porcentaje de adultos indígenas con cuadros de peso exagerado, más que los mestizos y montubios. Mientras que en la Amazonía no hay esta tendencia.

Estas cifras fueron calificadas por la ministra de Salud, Carina Vance, como “datos alarmantes”.

Vance expresó que se está trabajando en los etiquetados de productos, pues más de la mitad de los alimentos procesados tienen altos índices de grasas y azúcares.

El nuevo etiquetado, que estará listo en cinco meses, tendrá figuras en colores para distinguir niveles de azúcar, grasa y sal.

“Será necesario comprometer la responsabilidad para asegurar que nuestra población tenga acceso a alimentos sanos”, manifestó durante la presentación de la encuesta.

También comprometió la responsabilidad a la publicidad masiva de alimentos en la televisión, pues a su criterio son mensajes que impactan a los niños. La industria destina mensualmente $14 millones a comerciales relacionados con la comida procesada, según la Ministra.

La obesidad ha sido considerada como una pandemia mundial. En América del Sur, países como Venezuela, Argentina y Chile sobrepasan el 30% de obesidad de sus habitantes, según un informe de la FAO publicado en 2013.

¿Dónde radica el problema?
El alimento que más prima en la mesa ecuatoriana es sin duda el arroz, un cereal con alto nivel nutricional, pero que al ingerirlo en exceso sobrealimenta.

El 32,8% de energía diaria que un ecuatoriano tiene es gracias a este cereal; el 19,2% de proteínas diarias provienen de éste y el 47,3% de carbohidratos también.

Hay un claro exceso de arroz para la nutricionista Loli Robalino, quien explicó que el promedio de consumo diario del alimento debe ser de 60 gramos, solamente media taza.

En el país, el primer alimento que proporciona fibra es la papa, “mas no las frutas y verduras como se recomienda”, dice Robalino.

La OMS indica que el promedio mínimo de consumo diario de frutas y verduras debe ser de 400 gramos. En Ecuador, el consumo promedio es de 183, menos de la mitad del valor óptimo.

Los alimentos con grasa que más se consumen al día son el aceite de palma, el pollo y el pan. Este último producto está sobre el consumo de carne de res.

“Nuestros hábitos han cambiado bastante, hay tendencia a la alimentación con grasa y comida rápida. La población cree que no hay gente con sobrepeso, nos hemos acostumbrado a ver a las personas gruesitas como saludables”, agrega la nutricionista Robalino.

Estilo de vida
La prevalencia de actividad física en el país también presenta datos que alarman a las autoridades. Más de un tercio (34%) de los adolescentes son inactivos, y el 31,1% es irregularmente activo. Solo tres de cada 10 jóvenes realizan alguna actividad física o deporte después de las tareas diarias.

Estos resultados varían con respecto a los adultos de hasta 60 años. Un 46,2% de mujeres tiene mediana o alta actividad versus el 64,9% de hombres.

El informe destaca que el promedio de ver televisión y jugar videojuegos en niños, entre 10 y 19 años, es de dos a cuatro horas.

Esto explicaría algunos problemas de sobrepeso, según Vilma Freire, investigadora principal de Ensanut, quien alertó sobre el incremento de hipertensión y diabetes.

Enfatizó que es necesario reforzar las loncheras escolares en los colegios, el etiquetado de productos e hizo una convocatoria a las empresas privadas de alimentos para tomar medidas más sanas.