El rap en kichwa para empoderar a la mujer
Con el español y el kichwa como idiomas de combate, surgió la Mafiandina hace tres años. Este proyecto musical de Taki Amaru y Dj Mic, fusiona el rap y los ritmos andinos en canciones que expresan la cosmovisión andina, el empoderamiento de la mujer y la lucha contra la violencia de género.
Taki nació en Bogotá y a los 14 años se mudó a Ecuador donde descubrió Imbabura, tierra de montañas y lagos y donde bailó su primer Inti Raymi que la conectó con los Andes y su sabiduría.
Así se encontró con el kichwa y con todo lo que esta lengua ancestral conlleva como una visión política, histórica, identitaria, medicinal. Decidió entonces aprender el idioma porque no se atrevía a empoderarse del proyecto sin antes aprender el kichwa y sentirse kichwa.
“Me enamoré del baile que me llevó a descubrir que tenía que estar acá, pero quería entender qué era lo que decían, por qué se bailaba en círculos”, explica Taki, quien se preguntaba si esto era posible para una mestiza que tenía anhelo de reencontrarse con sus células guerreras.
El tiempo ha contestado su pregunta después de un camino en el que no faltaron las críticas de quienes la acusaron de apropiación cultural. Ahora vive en la comunidad Morales Chupa en Imbabura, con un nombre nuevo, portando la vestimenta y las tradiciones de la Cultura Kichwa Otavalo, con la que se identifica.
Atrás dejó su antiguo nombre de Lucía y pasó a ser Taki Amaru, “la fuerza de la tierra”. “Es simbólico llamarme Amaru porque veo mi transformación y cómo me he empoderado y cómo puedo empoderar a las mujeres”, asegura.
Temas
En sus canciones habla de reconectarse con esa serpiente que para las culturas milenarias siempre ha estado presente como el símbolo de la energía, de lo sagrado, de lo femenino, pero que ha sido oprimida por los occidentales.
Inspirada en esta filosofía, Taki escribió “Warmi Hatari” (Mujer levántate), que formó parte de la campaña Mujeres sin violencia: ¡Así gana Ecuador!, lanzada en 2018 en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se conmemora el 25 de noviembre de cada año.
Reivindicar el papel de la mujer en la sociedad y en el arte son las premisas que se integran en “Warmi Hatari”, con una letra en español y en kichwa.
El primer trabajo audiovisual de la Mafiandina, es “Amarumi”. En el videoclip se muestra un rito de purificación en una cascada, el cambio de Taki a las prendas ancestrales, la serpiente y un preparado de chicha en una ceremonia que invita a las mujeres a comprenderse a sí mismas y regocijarse en su feminidad.
Para Taki esto se trata de “volver a empoderar a todo el mundo con la energía de la serpiente”.
José Micrófono o Dj Mic, quien es el Dj, productor ejecutivo del disco y manager, señala que en el rap de la Mafiandina una de las herramientas más importantes es el kichwa que ofrece una musicalidad que le permite a Taki encontrar su flow y su forma de rapear en kichwa.
El propósito de la agrupación es despertar en los jóvenes y en las nuevas generaciones de warmis el gusto por el kichwa y enseñar la riqueza de la filosofía runa.
Para Dj Mic el desafío más grande de la Mafiandina es guardar el kichwa como idioma principal. “Es una dificultad, pero creemos que es un buen momento para que la gente joven sea abierta a estas propuestas”. (I)