Quito es una ciudad de tres centros
El Distrito Metropolitano de Quito es la ciudad más importante de Ecuador no solo por ser la capital sino también porque es el centro político y cultural, así como el centro de gobierno y administrativo del país.
Por esas razones, atrae a poblaciones diversas nacionales y extranjeras como el lugar ideal para vivir. Desde 2020, es la ciudad ecuatoriana más poblada, con 2’ 781. 641 habitantes (INEC).
La capital tiene 65 parroquias, 32 son urbanas y 33 rurales; el 68.8% de la población habita el área urbana y el 31.2% el área rural.
Esto dice el informe Quito Cómo Vamos sobre la calidad de vida de los residentes en esta ciudad desde varias perspectivas, elaborado por seis organizaciones y fundaciones nacionales y una internacional: Tándem, Fundación Ciudadanía y Desarrollo, Cámara de Industrias y Producción, CEDATOS y GK (medio de comunicación digital), y Fundación Panamericana para el Desarrollo (PADF).
¿Cómo crece la capital?
Según el estudio, si se mantienen las tendencias históricas de crecimiento hasta 2040, la población en la capital será de 3.44 millones de habitantes, es decir, habrá 700.000 habitantes más en los próximos 20 años.
Ese crecimiento será más alto en las áreas rurales, con el 37% de la población en la próxima década. Quito está dividida en nueve administraciones zonales: Calderón, Los Chillos, Eloy Alfaro, Eugenio Espejo, La Delicia, La Mariscal, Manuela Sáenz, Tumbaco y Quitumbe.
Hay un proceso de expansión urbana hacia las parroquias rurales más cercanas al hipercentro urbano como Calderón (6.58%), San Antonio (5.60%), Nayón (5.46%), Conocoto (4.95%), Cumbayá (4.55%) y Pomasqui (3.98%), las cuales representan las mayores tasas de crecimiento.
Es una ciudad joven
Quito tiene la mayor parte (34%) entre adultos jóvenes de 20 a 39 años, seguida de niños y adolescentes (27%) y menos adultos mayores de 65 años o más (6%). Hay más mujeres que hombres, señala el estudio Quito Cómo Vamos.
El Conadis informa que la población con discapacidad declarada es de 67.947,36 836 hombres: 31.108 mujeres y apenas 3 habitantes de la población LGBTI (Lesbianas, Gais, Bisexuales, Transgénero, Transexuales, Travestis e Intersex).
Según el tipo de discapacidad, el porcentaje de personas con discapacidad, beneficiarias del Bono Joaquín Gallegos Lara, es física (36.53%), intelectual de (32.03%), auditiva (15.9%), visual (9.24%) y psicosocial (6.26%).
Además, las personas de 65 años en adelante forman parte del 35.33%, lo cual las convierte en el mayor número de beneficiarios; mientras que los niños de 0 a 3 años son el 0.27%.
Migrantes venezolanos
Según la Encuesta de Condiciones de Vida de 2014 del INEC, el 86.9% de los quiteños se registra como población no migrante y el 13.1% como migrante, de los cuales el 84% señala que ha migrado desde otras provincias del país.
La migración de ciudadanos venezolanos incrementó en los últimos años en razón de la crisis económica, social y política que vive ese país. Según ACNUR, existen más de 4.7 millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela a escala mundial.
De acuerdo al Ministerio de Gobierno, 1.4 millones de venezolanos ingresaron a Ecuador entre enero de 2018 y septiembre de 2019; 1.3 millones ya abandonaron el territorio ecuatoriano.
En 2020 la OIT publicó una sistematización de estudios sobre esta población en Quito y Guayaquil. De la población migrante que se asienta en el norte de Quito, el 60% tiene entre 29 y 30 años y desempeña una actividad laboral. El 20% corresponde a niños y adolescentes entre 1 y 19 años, y el 18.60% son personas mayores de 40 años.
Los niveles de educación son altos. El 61% de venezolanos adultos posee título de tercer nivel y un 39% de cuarto nivel. Mientras el 83% de venezolanos no posee un trabajo en su profesión; el 24% son meseros o se dedican a las ventas ambulantes y cuentan con estudios universitarios; el desempleo de esta población asciende al 11%.
Según la Plataforma de Coordinación para los Refugiados y Migrantes de Venezuela (2019), el 95.5% ha sufrido algún tipo de discriminación en el trabajo por su condición de extranjero.
Aumento de población requiere políticas públicas
El informe Quito Cómo Vamos explica que el crecimiento poblacional al 2040 debe ser considerado en la planificación urbana para determinar hacia dónde crecerá la ciudad. Hay que tomar en cuenta la expansión urbana hacia las parroquias suburbanas y que la densidad poblacional de la mancha urbana es baja.
El informe advierte que el crecimiento de la ciudad no planificado representará mayor presión, en especial en el acceso a servicios básicos, sistema de movilidad y transporte público, provisión de vivienda y espacio público de calidad.
Actualmente, los quiteños son jóvenes, pero empezarán a envejecer y se requiere adecuar la infraestructura y servicios para los futuros adultos mayores.
La población migrante venezolana debe ser incorporada a nivel laboral y social para evitar conflictos y la precarización de su calidad de vida.