En los próximos meses se realizará un conteo de todas las variedades que habitan en la isla
Punta Pitt, hogar de 3 especies de piqueros
En 2013, cuando se realizó un censo de población de los piqueros patas rojas en la isla Punta Pitt, de San Cristóbal, se contabilizaron 427 aves. Luego de 2 años, los guardaparques determinaron que la cantidad de esta especie en la zona había aumentado considerablemente. Hasta hoy se registran 752 aves adultas y 1.107, contando también a los juveniles y pichones.
Para las autoridades ambientales el incremento de los sula sula —como se denomina de forma científica a esta variedad—, significa un logro, tomando en cuenta que luego del fenómeno de El Niño, en 1998, la cantidad de piqueros se redujo a 45.
Para la preservación de esta especie, propia de las islas Galápagos, se inició un plan de conservación que tomó fuerza en los últimos 7 años, como lo explica Carlos Ortega, responsable de la Unidad Técnica San Cristóbal de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG).
El trabajo principal se concentró en la erradicación de especies introducidas como gatos, roedores, hormigas y cabras. “Al no existir cabras, que comieran la vegetación donde duermen o anidan los piqueros patas rojas, se ha recuperado la vegetación, y las especies pueden desarrollarse en un sistema sin afectación y no tienen complicaciones con sus polluelos”, explica.
El biólogo Tjitte de Vries conoce de cerca a la especie de piqueros patas rojas desde la década de los sesenta, cuando hacía observaciones en las islas Galápagos.
Él especialista señala que el ave anida en arbustos, y, precisamente, en Punta Pitt tiene algunos sitios para el efecto, por lo que sostiene que ese hábitat es propicio para la reproducción de la especie.
De acuerdo con información del Ministerio del Ambiente, Punta Pitt es uno de los pocos lugares en el archipiélago donde anidan piqueros patas rojas y el único en todo el archipiélago donde se puede encontrar a las 3 especies de piqueros (patas rojas, patas azules y enmascarados).
La ubicación geográfica brinda suficiente alimento por lo que no hay competencia entre ellos. Los piqueros de patas azules anidan en el interior, los piqueros de patas rojas sobre arbustos y los enmascarados en los acantilados.
Los piqueros patas rojas tienen un color pardo oscuro en el dorso y la cola, mientras que en la cabeza y el cuello tiene una tonalidad más alta. Su tamaño es de aproximadamente 70 centímetros y se alimentan de peces voladores y calamares.
La especie es nativa en Galápagos y habita en Santa Cruz, San Cristóbal, Isabela, Floreana, Genovesa, Darwin y Wolf, así como a lo largo de la costa de los océanos Pacífico y Atlántico.
Para el censo los guardaparques registraron las coordenadas en las que se encuentra el nido o el ave censada para poder realizar un seguimiento en los próximos monitoreos que se realizan cada 2 años.
De Vries manifiesta que para conocer con precisión la población de la especie se podría hacer un estudio más amplio. Por lo pronto, la DPNG informó que en los próximos meses se realizará un censo de aves en la zona de Punta Pitt para contabilizar y controlar a otras especies diferentes. (I)