Preguntas claves sobre el ébola
¿Qué es la enfermedad por el virus del Ébola?
La enfermedad por el virus del Ébola (denominada anteriormente fiebre hemorrágica del Ébola) es una enfermedad grave y con frecuencia letal.
Se detectó por primera vez en 1976 en dos brotes simultáneos, uno en una aldea cercana al río Ébola (de allí su nombre), en la República Democrática del Congo, y el otro en una zona remota de Sudán.
Se desconoce el origen del virus, pero las pruebas científicas disponibles apuntan a que los murciélagos frugívoros (familia Pteropodidae) son sus huéspedes más probables.
¿Cómo se contagia?
El ébola es una enfermedad que transmiten a los humanos los animales salvajes (monos y murciélagos de la fruta, especialmente estos últimos, son las especies consideradas huéspedes naturales del virus).
Entre personas, el contagio se produce únicamente por contacto directo, a través de las membranas mucosas o de soluciones de continuidad de la piel, con la sangre u otros líquidos o secreciones corporales (heces, orina, saliva, semen) de personas infectadas.
También puede producirse cuando las soluciones de continuidad de la piel o las membranas mucosas de una persona sana entran en contacto con entornos contaminados por los líquidos infecciosos de un paciente con el virus, como prendas de vestir o ropa de cama sucias o agujas usadas.
¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad?
Los primeros síntomas de esta enfermedad son fiebre repentina y alta, debilidad intensa y dolor muscular, de cabeza y de garganta, seguidos de vómitos, diarreas, erupción cutánea, funciones renal y hepática alteradas e intensas hemorragias internas y externas.
¿Cómo se diagnostica a una persona contagiada?
Una vez que se comprueba que un paciente presenta síntomas compatibles con la enfermedad (especialmente fiebre alta y persistente) se le somete a análisis de orina y saliva.
Los exámenes más comunes, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), son pruebas de: inmunoadsorción enzimática (Elisa), detección de antígenos, seroneutralización, reacción en cadena de polimerasa con transcriptasa inversa y aislamiento del virus mediante cultivo celular.
Las muestras de los pacientes infectados tienen un enorme peligro biológico y han de tomarse en condiciones de máxima protección.
¿Cuánto tarda en manifestarse la enfermedad?
El periodo de incubación varía de 2 a 21 días, aunque generalmente los síntomas aparecen entre los 5 y 10 primeros días tras el contagio.
¿Cómo actúa el virus?
El virus altera un tipo de células llamadas "endoteliales" que recubren la superficie interior de los vasos sanguíneos y la coagulación.
Al dañar los vasos sanguíneos las plaquetas no son capaces de coagular, y los pacientes sucumben a un shock hemorrágico que deriva en una pérdida muy grave de sangre.
¿Hay cura para el ébola?
No existe un tratamiento específico ni una vacuna fiables que hayan dado resultados positivos concluyentes en humanos. La esperanza son unos cócteles de anticuerpos que han sido probados con éxito en monos y experimentalmente en algunas personas, el más conocido de ellos el ZMapp.
La producción a gran escala de estos medicamento, que resulta muy lenta, es el principal reto en estos momentos, ya que se dispone de muy pocas unidades.
Otra vía de investigación que se está probando es el tratamiento con plasma de convalecientes que han superado la enfermedad.
La OMS ha autorizado la investigación con ocho tratamientos experimentales y dos vacunas.
¿Cómo funcionan los anticuerpos?
El cuerpo humano tiene la capacidad de generar por sí mismo los anticuerpos para combatir el ébola al igual que cualquier otra infección, aunque el problema es que el avance del virus dentro del organismo hasta resultar mortal es tan rápido que el cuerpo no tiene tiempo de generar las defensas.
Los anticuerpos o inmunoglobulinas son grandes proteínas capaces de reconocer determinadas moléculas invasoras y adherirse a ellas bloqueándolas.
¿Siempre resulta mortal?
La fiebre hemorrágica del ébola es una de las enfermedades más mortíferas para el hombre, con una tasa de mortalidad del 25 al 90 por ciento.
¿Qué puedo hacer para prevenir la enfermedad?
Entender la naturaleza de la enfermedad, cómo se transmite y cómo impedir que siga extendiéndose.
Escuchar y cumplir las directivas del Ministerio de Salud de su país.
Si sospecha que algún pariente o vecino puede estar contagiado, aliéntelo y apóyelo para que busque tratamiento médico apropiado en un centro sanitario.
La OMS no aconseja la atención a domicilio, y recomienda a los pacientes y a sus familiares que busquen atención profesional en un centro terapéutico.
Cuando visite a un paciente en el hospital o lo atienda en su domicilio, se recomienda que se lave las manos con agua y jabón después de tocarlo, de entrar en contacto con sus líquidos corporales o de tocar objetos de su entorno.
Los cadáveres de las personas fallecidas con ébola deben ser manipulados con protocolos adecuados y enterrados inmediatamente.
Además, hay que reducir el contacto de las personas con animales con alto riesgo de estar infectados (murciélagos frugívoros y simios) en las zonas de selva tropical afectadas. Si sospecha que un animal puede estar infectado no lo toque. Los productos de origen animal (sangre y carne) deben cocinarse bien antes de comerlos.
Medidas de prevención y contingencia en Ecuador
Pese a que la posibilidad de que el ébola llegue al país es baja, el Ministerio de Salud Pública (MSP) está preparado para afrontar cualquier caso y brindar la atención necesaria, informó el lunes 6 de octubre la ministra del ramo, Carina Vance.
Para prevenir la propagación de la enfermedad, se ha capacitado a epidemiólogos de las coordinaciones zonales y a los responsables del área de epidemiología de sanidad internacional de aeropuertos.
Como parte de la capacitación, se ha preparado material informativo sobre las implicaciones de la introducción del virus en las Américas, el agente causal de la enfermedad por el virus del Ébola (EVE), la evolución clínica, las recomendaciones para abordar el brote; también, se difundió el plan de preparación y respuesta frente a la EVE.
Esto se realiza de acuerdo a las recomendaciones de la OPS/OMS, que solicita a los Estados Miembros permanecer vigilantes ante la potencial introducción del EVE en las Américas, y concientizar y ampliar el conocimiento de la enfermedad.