La red internacional Social Watch publicó, para conmemorar el Día Internacional de la Mujer,  el informe llamado “Índice de equidad de género 2012 (IEG)".

Este documento, según quienes elaboran el balance anual, mide la brecha entre hombres y mujeres en el campo educativo, económico y político.

Las cifras presentadas por Social Watch coinciden parcialmente con las mediciones del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos de Ecuador (Inec), que detallan cómo en el país las mujeres tienen un ingreso laboral promedio de $326.87 y los hombres uno de $408.14.

Según la organización extranjera, la participación de la mujer en la fuerza laboral es apreciablemente menor que la de los hombres.

Los sueldos son considerablemente menores cuando se trata de realizar el mismo trabajo, y un porcentaje mayor de féminas tiene empleos vulnerables e irregulares.

Estos logros, inferiores a los que mantienen los hombres en participación económica y empoderamiento político, se repiten en los 154 países que el grupo estudió para elaborar el reporte.

Las cifras del Inec muestran que en Ecuador el 12% de las mujeres tiene una profesión de tipo científico e intelectual, frente a un 5.8% de hombres en las mismas ramas.  

El IEG calcula un valor de 71, sobre 100, que consideran bajo, en el área educativa para la mujer, de 42, calificado por ellos como muy bajo, para la participación económica, y de 17, llamado “Crítico”, para el empoderamiento político.

Noruega (89), Finlandia (88), Islandia y Suecia (87), Dinamarca (84), Nueva Zelanda (82) y Mongolia y España (81), son los países mejor puntuados por el organismo, manteniendo un IEG “medio”.

Ningún país del mundo ha llegado a los 90 puntos o más, lo que significa, según la calificadora, que ninguno ha llegado a un nivel “aceptable”.

En la peor situación se encontrarían la República del Congo, Níger, Chad, Yemén y Afganistán, con índices que van desde un máximo de 29, hasta un mínimo de 15 en la calificación.

El Producto Interno Bruto no estaría directamente relacionado con el grado de equidad que allí exista, por ejemplo, Mongolia, Rwanda, Las Filipinas y Nicaragua tienen índices que oscilan entre 81 y 74, aunque los hombres y mujeres que allí residen viven en la pobreza.

En cambio, en países que tienen ingresos altos como Japón, Turquía y Arabia Saudita, los índices alcanzan entre 57 y 37 puntos, cifras consideradas por la medición como un indicador de desigualdad.

“Se puede reducir la disparidad de género si se aplican políticas adecuadas”, aseguran desde la organización Social Watch.