Museo trabaja en recuperar historia monetaria nacional

Decenas de escolares se reunieron en el Museo Numismático del Banco Central en Quito para hacer un recorrido por el pasado y conocer acerca del sistema monetario del país.

La transformación de la moneda, sistemas mercantiles y el trueque son parte de los temas que la institución quiere difundir en los niños como una manera de fortalecer el pénsum académico, explicó Carlos Iza, director del Museo. 
El funcionario aseguró que la importancia de que los niños participen en estos talleres que son de tipo lúdico, es que a través de la moneda aprendan y reconozcan la identidad del país.

Las dramatizaciones, acertijos, rompecabezas, ejemplares de monedas y billetes nacionales de juguete son las herramientas que permitirán a los niños acercarse a la historia nacional.

“Es obligación del museo enseñar de una manera diferente lo que ha sido el  país en el que ellos no vivieron”, afirma.

Muchos de los pequeños estudiantes desconocían que antes de ellos el país tuvo una moneda propia que ahora es reemplazada por el dólar norteamericano.

Nicole Santillán, estudiante de sexto nivel del colegio Heredia Bustamante, señaló que aunque dentro del aula le dan materias relacionadas con la cívica, en donde escuchan historias de héroes que lucharon por la libertad del país, logran comprender mejor el pasado a través de los juegos y de la interacción con personajes creados.

“Nosotros somos parte de la historia en las dramatizaciones y ahí es más fácil acordarse de todo”, dijo.

Odette Quiñónez, otra de las niñas asistentes, comentó que hasta ahora hay muchas cosas que ella desconocía de la historia monetaria, por ejemplo, nunca vio un billete de cinco sucres, pese a que escucha hablar de éste en las historias que le narran sus abuelos.

“Con estos juegos pude comprender  por qué las monedas que usaban nuestros antepasados eran tan importantes y cómo las hacían”, comenta mientras fabrica su propio dinero con papel aluminio y un molde a presión que marca en relieve las características que tenían las antiguas monedas.

La facilidad de transportar los materiales permite que los técnicos del Museo numismático puedan llevar los juegos a colegios que están en otras provincias.

Además de los juegos y la interacción de los niños con personajes del pasado, se proyecta una película y talleres prácticos que servirán para reforzar lo que se aprendió a través del juego.

En este se encuentra un túnel del tiempo, adivinanzas y ejercicios de memoria.

Para Elizabeth Torres, docente de ese establecimiento, este tipo de prácticas que acercan a los niños al pasado y al presente, permiten elevar la calidad de los estudios y ampliar  los conceptos que se manejan dentro del aula de clases.

También sugiere que las escuelas se unan a este tipo de iniciativas o las realicen en los mismos colegios cuando un tema no ha sido bien comprendido o se aproxima una evaluación.

“Es impresionante cuánto puede aprender un niño a través del juego y esto no quiere decir que se deben reemplazar los libros, sino utilizarlos de una manera adecuada”, manifestó.

María José Mogrovejo, estudiante, afirmó que en su casa el repaso de las materias se hace a través de ejercicios lúdicos y que eso le permite mantener mejor los conocimientos para aplicarlos al momento de rendir una evaluación.
“Cuando leo las preguntas me acuerdo qué hice mientras repasaba ese tema, me acuerdo de chistes o juegos y así me va mejor”, aseguró.

Iza advierte que se debe fortalecer la enseñanza de la historia para que los niños la valoren mejor.