Muchos baldes de agua, pero pocas donaciones efectivas
La esclerosis lateral amiotrófica es una enfermedad neurodegenerativa que tiene poca investigación en el mundo. Uno de cada 10 casos de esclerosis lateral amiotrófica (ELA) se debe a un defecto genético, mientras que en el resto de los casos se desconoce la causa.
En la enfermedad, las células nerviosas (neuronas) se desgastan o mueren y ya no pueden enviar mensajes a los músculos, lo cual finalmente lleva a debilitamiento muscular. Afecta aproximadamente a 5 de cada 100.000 personas en el mundo.
Intentando reunir fondos para su investigación y quizá una posible cura, la Asociación de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ALS Association) estadounidense creó el reto ‘Ice Bucket Challenge’ (Reto del cubo de hielo, en español).
Este consiste en arrojarse un balde de agua fría y retar a 3 personas más, quienes deben hacerlo en menos de 24 horas. Quien sea retado y haga el video deberá donar $ 10 y quien no lo haga deberá donar $ 100.
¿Cómo van las donaciones? En EE.UU. la organización ha recaudado $ 23 millones y medio, muy por encima de los $ 2 millones que logró el año pasado.
Pero no ocurre igual en otros países de Sudamérica que se han sumado a la iniciativa o quizá solo a la ‘moda’ del balde de agua fría.
En la región hay muchos baldes y pocas donaciones. Diego Ryba, presidente de la Fundación para la Investigación de la Esclerosis Lateral Amórfica (Fundación ELA) en Argentina, contó que hasta el momento y a pesar de la “ola de baldazos, solo han recaudado $ 1.000”.
Uruguay se subió a la campaña de ALS, pero no ha recibido ni un centavo. Y qué decir de Ecuador donde no se reportan donaciones a la asociación internacional, pero sí muchos personajes de farándula mojados en agua fría.
En las redes sociales, tanto de Ecuador como del mundo, se critica la iniciativa alegando que no es necesario gastar miles de litros de agua para reunir fondos.
Esto cobra sentido cuando se estima que 750 millones de personas no tienen acceso al recurso en el mundo.
