Erik Mozo terminó su periodo como presidente de la Federación de Estudiantes de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE) el viernes pasado. Sin embargo, afirma que su gestión para seguir denunciando las irregularidades, entre ellas el cobro excesivo de matrículas, continuará.

Mozo fue electo presidente de Federación Nacional de Estudiantes de las Universidades Particulares del Ecuador (Feupe), desde donde promoverá la creación de un reglamento que fije las reglas claras a los centros de educación superior sobre el tema de cobros en las matrículas, "que el alza en las matrículas no sea tan abrupta".

Señala que, entre otros, el nuevo reglamento promoverá que si bien los incrementos se produzcan en cuanto a la inflación, se apliquen para los estudiantes que recién ingresa a la universidad y no para quienes están concluyendo la carrera e ingresaron con otras reglas del juego. Así, también, sostienen que promoverán que todo cambio se realice de manera consensuada y notificada al Consejo de Educación Superior (CES).

Sostiene que en un año, por ejemplo, los estudiantes recibieron en la PUCE incrementos de hasta $ 1.400 a $ 1.600 y que en la Federación recibieron varias denuncias y preocupaciones de los estudiantes que tendrían que dejar la carrera por los cobros excesivos.

Indica que algunos alumnos de la PUCE tuvieron que coger menos materias (créditos) y hasta se endeudaron para poder asumir los nuevos costos. "El 25% de estudiantes se endeudaron para poder seguir estudiando", comenta, pues indica que los horarios no permiten a los estudiantes encontrar un trabajo que les permita solventar los gastos.

Afirma que quienes más afrontaron estos problemas fueron los estudiantes de las categorías más bajas como la A. Explica que en este centro de estudios, los estudiantes están divididos por el nivel socioeconómico. La categoría más alta es la E, sin embargo, "quienes menos pagan, en la categoría A, con las reformas son ahora los más afectados".

Dice que hay casos de chicos que ahora pagarían hasta $ 6.000 por el semestre, "y el costo no justifica por el servicio y la educación que están recibiendo".

Sin embargo, asegura que este no sería el único caso, pues han recibido denuncias de otras universidades como la Universidad de las Américas (UDLA) y la Salesiana, que están investigando.