La calle Pedro Gual y Chile se llenó la tarde de este domingo. Cerca de 15 mil portovejenses acudieron a la misa campal en la cual se recordó el año del terremoto del 16 de abril, que enlutó a varias familias de la capital manabita. En ese lugar estuvo el concejal Javier Pincay, quien lució una camiseta con nombres impregnados de ocho personas. Son sus familiares que fallecieron en la tragedia. Su cara demostró la tristeza que lo embarga. El 16 de abril perdió a esposa, hija, suegra, cuñada, sobrino político y su concuñada con dos hijos.

En el acto religioso las ofrendas fueron lampas, cemento y más herramientas, como símbolo de reconstruir la ciudad.

Al lugar acudió el vicepresidente Jorge Glas. En su paso se detuvo al frente de una pared de lona donde los asistentes ubicaban mensajes. Él colocó la frase: “todos unidos y de pie. Todos unidos para reconstruir”.

Glas mencionó que Manabí demostró ser un ejemplo de vida para el país y el mundo. “La reconstrucción continúa, todavía falta bastante. Dijimos que la reconstrucción nos va a tomar tres años. Hemos dado pasos muy fuertes en reactivación”.

Recordó que a la fecha se han asignado $ 2.400 millones; “debe haberse ejecutado $ 1.400 millones. Estamos con cada familia, cada emprendedor para esa promesa de reconstruir Manabí. Ahora la provincia sufre las consecuencias del invierno; hemos estado trabajando para recuperarnos de esa nueva tragedia de la naturaleza”. (I)