El costo de exclusión de migrantes es mayor que el de la inclusión, según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Esa idea se planteó en el taller “Proporcionar acceso a vías migratorias regulares, de la crisis a la seguridad”, que se desarrolló en Quito.

Matilde Mord, representante de PNUD en Ecuador, advirtió en el encuentro que las naciones receptoras de migrantes deben apreciar el aporte productivo y laboral que generan, por lo que insistió en que es más beneficioso incluirlos que excluirlos.

Actualmente, según la entidad, una de cada siete personas está en movimiento y 272 millones siguen fuera de su país de origen. “Muchos tienen la esperanza de mejorar su calidad de vida y mandar dinero a su familia”. El 1% de la población mundial fue desplazado por la fuerza.

La Unión Europea (UE), el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) tienen la intención de organizar una conferencia internacional de la solidaridad en Bruselas a finales de octubre para poner el tema en la agenda.

El jefe del programa de Iniciativas Internacionales del Centro Internacional para el Desarrollo de Política Migratoria destacó la necesidad de que la comunidad global actúe de manera solidaria y coordinada para brindar respuesta a la crisis migratoria.

Ecuador resaltó en el mes de abril, en calidad de presidente del Foro Global sobre Migración y Desarrollo (FGMD), la estrecha relación que hay entre el fenómeno migratorio y el desarrollo sostenible, en un encuentro organizado en la sede de la ONU.

En el encuentro, el presidente del FGMD, el ecuatoriano Santiago Chávez, subrayó las relaciones entre migración y desarrollo sustentable, y la importancia que el Gobierno atribuye a ambas cuestiones.

En particular, recalcó la promoción sostenida, inclusiva y sostenible del crecimiento económico. (I)