Marcha recorrió Urdesa por el Día Mundial del Perro Callejero
Dos niñas se agacharon para acariciar a Floyd, y el perrito respondió con efusividad, lamiendo las manos de las pequeñas. Luego corrió donde otra persona que también quería tocarlo, pues por su diminuto tamaño llamaba la atención en medio de otros perros mucho más grandes.
María Claudia Alvarado lo encontró hace 3 años, deambulando en el centro de Guayaquil. Le llamó la atención pues no parecía callejero, pero al parecer estaba perdido. “Cuando abrí la puerta del carro se subió de una, como si siempre hubiera estado con nosotros. Buscamos a sus dueños, pusimos avisos en las redes sociales pero nadie se comunicó”, relata la mujer.
Tal vez fue abandonado por su familia, tal vez estaba extraviado. Lo cierto es que el pequeño can tuvo la fortuna de encontrar un nuevo hogar donde ahora es el mimado. “Fue el compañero perfecto para mi hijo pequeño, que lo adora”, comentó María Claudia.
La historia de Floyd es parecida a la de muchos de los perros que la mañana de hoy fueron llevados por sus dueños hasta el centro comercial Albanborja, en el norte de Guayaquil. Desde ahí partió la marcha para conmemorar el Día Mundial del Perro Callejero (que fue el pasado 27 de julio) y en apoyo a la Ley Orgánica de Bienestar Animal (LOBA), que actualmente se discute en la Asamblea Nacional.
Relatos de abandono, hambre y maltratos, que ahora están en el pasado para estos animalitos que, gracias al cariño de sus nuevas familias, pudieron abandonar las calles. Y sirven de inspiración para seguir ayudando a la fauna urbana.
“No hay un cálculo estimado ni estudios que nos digan cuántos animales hay en la calle”, afirma Viviana Vásconez, de la Fundación Rescate Animal. “Sin embargo cada día el número crece, los reportes en redes sociales son muchos y hay más cada vez”.
Algo que incide directamente en el aumento de casos es el descuido y la indiferencia de mucha gente, que deja escapar al animal o lo echa a la calle. “Muchos callejeros algún día estuvieron en una casa y acabaron en la calle”, afirma Vásconez. Estos perros, al no estar esterilizados, se reproducen y de ahí vienen los canes que abundan en la ciudad.
Contra el maltrato
Viviana Vásconez comentó que inicialmente se presentó en la Asamblea el proyecto de ley LOBA de manera autónoma, “pero al no ser posible de esa forma, estamos apoyando la inclusión de un capítulo especial del proyecto en el Código Orgánico del Ambiente (COA)”.
“Hay algunas sanciones respecto a la tenencia en malas condiciones, se va a regular el maltrato y también la comercialización de animales, que no se puede dar en la vía pública. Y también la esterilización de animales en adopción y venta”, explicó la activista.
En la marcha se vieron casos como el de Hay casos como el de Chester, un perrito callejerito que fue hallado hace 3 meses por Rescate Animal, tras ser atropellado por un carro en el sector de Las Orquídeas. “Tiene el hombro dislocado y está en terapia. Actualmente permanece en un hogar temporal y lo estamos dando en adopción responsable”, comentó María Cristina López, miembro de la Fundación.
O Leopoldo, quien era mantenido en un taller del cantón Milagro, encadenado y en pésimas condiciones. Él fue rescatado por Flor de María Maldonado y ahora es un miembro más de su familia.
La marcha partió a las 10:45 y recorrió la calle Ilanes hasta la avenida Víctor Emilio Estrada. De ahí las más de 200 personas caminaron con sus mascotas hasta el Parque Jerusalén (Urdesa), donde finalizó el acto después de las 12:00.
La temperatura era agradable, pero empezó a calentar y varios participantes le dieron agua a sus perros, para refrescarlos. En el camino se fueron incorporando más personas que no alcanzaron a llegar al punto de partida. Todas unidas por el cariño hacia sus ‘mejores amigos’.
“Cada vez hay más gente volcada en el tema de cuidado de los animales”, puntualizó Vásconez. “La asistencia ha sido muy positiva, en redes sociales la gente apoya a las organizaciones y los mensajes a favor de los animales”.
La segunda vicepresidenta de la Asamblea, Marcela Aguiñaga, quien siempre ha sido una defensora de los animales, acompañó la marcha. Al finalizar, en el Parque de Urdesa, dejó la huella de su mano en una tela blanca en forma de respaldo.
En su Twitter, la dirigente política escribió: "Libres de miedo, hambre y dolor. Los animales son parte de la familia, hoy marchamos por su protección". Indicó además: "Hay cosas que no podemos permitir, hoy los animales en las calles deben ser una preocupación de todos". (I)