Noruega retiró fondos a empresas del sector
Los activistas ganan un round en la guerra contra el carbón
Ayer fue una victoria importante para la campaña internacional que defiende el abandono del carbón, una energía fósil particularmente contaminante. Ocurre precisamente antes de la Conferencia Internacional sobre el clima organizada en París en diciembre, la llamada COP21.
En la victoria hay un protagonista: Noruega. Por unanimidad, el Parlamento de ese país decidió que el Fondo Global de Pensiones del Gobierno tendrá que salir del capital de las empresas mineras y eléctricas en las que el carbón represente al menos el 30% de su negocio.
Este fondo controla unos 793.000 millones de euros y el 1,3% de la capitalización bursátil mundial de combustibles fósiles.
La decisión de retirarse, que se produce tras un compromiso acordado en la Comisión de Finanzas del 27 de mayo, afectará entre 50 y 75 empresas internacionales.
Según los defensores del medio ambiente, el impacto podría ser todavía más importante, y algunas estimaciones calculan que serán 122 las empresas afectadas. No se ha notificado oficialmente el nombre de las empresas que podrían verse afectadas por la salida del fondo, que invierte en 9.000 sociedades.
Tentativamente la medida afectará a 35 grupos estadounidenses, incluido Duke Energy, el español Endesa, una docena de chinos, ocho japoneses, los gigantes alemanes EON y RWE, el británico SSE, el indio Reliance Power, el italiano Enel, el portugués EDP, el sudafricano Sasol, el surcoreano Korea Electric Power, el sueco Vattenfall y el danés Dong.
La decisión del Parlamento noruego asesta un duro golpe al carbón y representa un notable apoyo para la lucha contra el cambio climático. Otras empresas, como la aseguradora francesa Axa, ya han anunciado que reducirán sus inversiones en el sector del carbón, para disminuir las emisiones de CO2.
Si bien estos anuncios son importantes no son más que una gota de agua en un inmenso mar, puesto que se prevé que la demanda de carbón seguirá creciendo hasta 2019 a un ritmo de 2,9% anual. (I)