Rocío de Moreno, presidenta del Comité Interinstitucional Plan Toda una Vida, acompañó a la Brigada conformada por Las Manuelas, médicos del Ministerio de Salud, técnicos de los Ministerios de Inclusión Económica y Social, y de Vivienda, al recorrido que realizaron por los hogares de las personas con discapacidad en el cantón Machala (El Oro).

En el barrio Eloy Alfaro visitaron el hogar de Wilson Lavanda de 45 años con 75 % de discapacidad física producto de una caída mientras laboraba. Vive con su esposa, sus dos hijas y su nieta, es el sostén y cabeza de su familia. A él se le entregó una silla de ruedas, pues en la que se movilizaba la alquilaba a tres dólares diarios.

A este núcleo familiar se le actualizó el Registro Social para que puedan beneficiarse de todos los servicios que entrega el Estado.

Técnicos del Registro Civil, que acompañaron en el recorrido a la Brigada, ceduló a tres de los miembros de la familia y a la cuñada de Wilson. “Parece un sueño que tantas personas estén en mi humilde casa, es una bendición de Dios” acotó el beneficiario.

Al igual que esta familia, en el cantón Machala Las Manuelas tienes previsto identificar a unas 5.600 personas con discapacidad y a más de 15 mil en El Oro.

“La ayuda que se les entrega es integral a través de un trabajo coordinado con las distintas instituciones del Estado, pues además de la atención de salud que reciben, también se benefician de todos los programas y servicios del Gobierno para el cumplimiento de sus derechos”, señaló Rocío de Moreno, presidenta del Comité Plan Toda una Vida.

En el barrio Santa Rita, cerca a Puerto Bolívar, llegaron a la casa de Rabello Vásquez de 35 años, con 76% de discapacidad quien permanecía acostado en su cama junto a su madre Lucrecia Cusme.

Unas escaleras de madera conducen a un cuarto de caña donde se han dispuesto tres camas, una cocina, una mesa y unas sillas. Allí vive Rabello, su madre y sus tres sobrinos que tuvieron que trasladarse a Machala luego del terremoto del 2016 que afectó Muisne (Esmeraldas). (I)