Las aves rapaces surcan el cielo del Zoológico de Guayllabamba
'Toño' es un guarro que nació para cortar el viento con sus alas y abrirse paso entre las brizas. Esa es la destreza que ostenta cuando sale desde los frondosos árboles y planea con elegancia hasta aterrizar con prosa en una de las barandas de madera, ubicada en la Tribuna para vuelo del Zoológico de Guayllabamba, al norte de Quito.
Esta especie, también conocida como águila pechinegra, es un ave que llegó hace 11 años a este sitio de conservación. Primero habitó en el Parque Cóndor, localizado en la ciudad de Otavalo (Imbabura).
Desde que fue un 'avechucho', el plumífero se mantuvo en contacto con el hombre, por lo que ahora tiene una conducta humanizada y sería difícil regresarlo al entorno silvestre, ya que no podría ejercer la cacería por cuenta propia.
'Toño' es uno de los pájaros que fue rescatado de entornos de maltrato o de ambientes lejanos a su hábitat. En el lugar, las especies -después de una evaluación- se las somete a un proceso de rehabilitación física y psicológica. La recuperación consiste en retomar entrenamientos devuelo, lo que les permitirá mantenerse en forma. También se les alimenta con trozos de carne en horarios establecidos y porciones medidas.
En esa dinámica, el zoológico emprendió la muestra denominada 'Rapaces en vuelo', en donde 15 tipos de plumíferos vuelan y se ubican al frente de la tribuna y los visitantes admiran sus destrezas en el aire.
Las aves rapaces son aquellas que utilizan sus garras y pico para desgarrar su alimento. Dentro de este grupo se encuentran las cazadoras y carroñeros. En Ecuador existen 99 especies. Se pueden encontrar en todo el territorio ecuatoriano: desde el nivel del mar, hasta los altos páramos.
"Hemos conseguido que las especies recuperen su capacidad de vuelo, que vuelvan a mover las alas, no solo para ahuyentar, sino para que vuelen", refirió Martín Bustamante, director de la Fundación Zoológica del Ecuador y del Zoológico de Quito en Guayllabamba.
La iniciativa cuenta con el respaldo de Faunaetus, empresa especializada en el estudio y manejo de este tipo de plumíferos. Jacobo Quero, técnico español, es uno de los especialistas que informa a los ciudadanos sobre las características de los pájaros y se encargó de su entrenamiento para la muestra.
A decir del experto, esta exposición natural no solo se realiza para alcanzar el bienestar de los animales, sino que además que sea un espacio en el que se reflexione sobre el cuidado animal y la responsabilidad humana.
Para esta jornada, Jacobo capacitó al personal del zoológico. Eso implicó que los plumíferos se acostumbren a la presencia de los humanos, luego los animales fueron adiestrados para que reconozcan al sitio de conservación como el lugar en donde comen.
Para esto, cuando las aves se encuentran en pleno vuelo, se les coloca presas falsas (lagartijas de caucho, conejos de peluche) y se les colocan trozos de carne cruda. El ave agarra el anzuelo y saca la carne. De esa forma, no pierden su instinto de caza.
La exposición demora alrededor de 50 minutos, en los que los visitantes miran de cerca halcones, águilas pechinegra, quilicos silvestres, lechuzas, curiquingues, gallinazos, etc. En ese lapso, la animadora 'María Antoña Guamán' (Fernanda Buendía) llama a los pájaros que se posan ante el público expectante que se emociona con las coloridas alas.
Ese fue el caso de Janeth Mina, visitante de Esmeraldas (Esmeraldas), quien se desempeña como directora provincial del Ministerio del Ambiente. "La muestra me mantuvo emocionada porque este tipo de labores de alto nivel muestran la importancia del cuidado de las aves", expresó emocionada.
Ingreso
La muestra se realiza hasta finales de septiembre. La muestra se cumple en varios horarios: de martes a viernes, a las 11:30. Los fines de semana y feriados hay tres demostraciones: uno a las 11:30, otro a las 13:00 y el tercero a las 14:30.
Bustamante indicó que la exposición tiene un costo adicional de los $ 5 a la entrada del zoológico (para adultos) y $ 2,50 (para niños y tercera edad), ya que el valor recaudado será destinados a la investigación científica. Es decir, que la comunidad académica se involucre en investigar estas especies desde su propio hábitat e impulsar que el respeto a estas criaturas. (I)