La visita del Papa impulsa el comercio en los alrededores de la Plaza San Francisco
Crucifijos de metal, relicarios de madera, estampas plastificadas, gigantescos afiches, entre otros.Todo con la imagen del Sumo Pontífice.
Poco a poco, los alrededores de la Plaza San Francisco (centro de Quito) se engalanan con novedosos artículos alusivos a la llegada del Santo Padre, quien tiene previsto visitar la capital entre el 6 y 8 de julio próximo.
Durante su recorrido por el Casco Colonial está previsto su paso por la emblemática Plaza San Francisco. Este lugar tiene una extensión de 3 hectáreas y alberga a 13 claustros.
El sitio también atesora alrededor de 3.500 obras de arte colonial, de múltiples manifestaciones artísticas y variadas técnicas, especialmente aquellas correspondientes a la famosa Escuela Quiteña de arte.
En la Plaza se desarrollan múltiples actividades culturales, políticas, religiosas, pero este año una de las más representativas será el encuentro que tiene previsto el Papa con representantes de la sociedad civil, el 7 de julio, a partir de las 18:00.
Falta casi un mes para el "día cero". Sin embargo, los puestos de venta de imágenes religiosas que se encuentran alrededor se alistan para ofrecer a los visitantes los artículos que puedan llevarse como recuerdo ante un acto tan importante.
La respuesta es muy positiva comentó Isaac Peña, director de la Librería Prensa Católica, ubicada justo al frente del atrio de San Francisco.
El establecimiento funciona desde hace 100 años, por lo que es considerado como un punto de encuentro para las personas interesadas en comprar artículos religiosos al por mayor o menor.
En el interior del local se pueden observar desde gigantescos pósters con el rostro de Vicario de Cristo que miden alrededor de 2x5 metros, hasta diminutas estampas (30 mm x 50 mm) para el rezo de cada noche.
Peña reconoció que la visita del Papa fue un momento importante para promover su negocio, pero reiteró que las cosas que se encuentran en venta son ante todo "accesorios que ayudan a promover la fe católica".
El comerciante aseguró que lo que más se ha vendido en las últimas semanas son postales, afiches, medallas, denarios y sobre todo las cruces, figuras en fibra de vidrio, camisetas y porta-retratos. Los precios van desde $ 1,50 hasta $ 30 dependiendo del material y el tamaño del artículo.
Una de las novedades que tiene buena acogida son las cajas de pirograbado (artesanía hecha con fuego) en donde se pueden guardar los rosarios. Hay un lote que lleva la imagen del Papa junto con imágenes de las vírgenes como La Dolorosa, de El Quinche y de El Cisne.
El personal a cargo detalló que una de las cosas positivas del impulso al mercado es que las figuras son mano ecuatoriana. Algunas piezas vienen desde Chillogallo (sur) y otras desde Cotocollao (norte).
Para los lectores también se distribuyen obras literarias. Algunas escritas por el Papa argentino. Una de estas se llama Les pido que oren por mi, que son las primeras palabras que expresó antes de ser electo como la máxima autoridad de la Iglesia Católica y también se encuentran Papa Francisco en Brasil, que narra sus vivencias en los barrios más pobres de ese país. Los textos cuestan entre $ 5 y $ 30.
Hay quienes aprovechan para promover el talento ecuatoriano. Antonio Godoy, distribuidor y productor de música Católica, acude regularmente al establecimiento para promocionar cantantes que interpretan temas con cortes alusivos a la fe.
El empresario contó que en los próximos días espera distribuir un trabajo en honor al Sumo Pontífice a cargo de los artistas Paco Godoy, Byron Macías, Eduardo Miño Naranjo, Pepe Jaramillo, Chabelita Godoy y la agrupación Los Locos del Ritmo.
Hay otras ofertas en los alrededores de la Plaza. Justo al frente del local se encuentran los puestos de la Asociación de San Francisco, que se formó desde 1982 y actualmente cuenta con 10 socias.
Los locales se ubican al costado izquierdo del atrio. Cada puesto mide alrededor de 5 metros cuadrados. En cada uno se encuentran acomodados decenas de artículos, especialmente rosarios, cirios y crucifijos.
Ruth Villalba (42 años) creció dedicada al negocio. Desde hace una semana, la mujer llega a su puesto a las 08:00 para recibir las nuevas estampas y recortar las imágenes para venderlos junto con una cruz de madera por el valor de $ 1.
Janeth Jaramillo (50 años) es otra de las comerciantes que alistó su puesto para este menester. "Me siento bendecida de que el Papa vaya a pasar cerca de mi lugar de trabajo. Todavía no nos han informado si ese día podemos abrir el puesto, pero seguimos trabajando", dijo.
Incluso los fieles católicos empezaron a buscar proveedores para alistarse en la visita del Vicario de Cristo. Andrés Navarro, exalumno del colegio San Gabriel, es coordinador de un grupo de oración de 15 personas.
El pasado lunes Andrés llegó hasta el Casco Colonial para buscar camisetas. "Para nosotros es un privilegio la visita del Papa y queremos estar uniformados", comentó el joven.