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El ineval reveló que ciencias sociales tiene puntajes superiores
La matemática, el punto flojo en el ciclo Costa (Infografía)
Los resultados de las pruebas Ser Bachiller que tomó el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineval) al tercero de bachillerato del ciclo Costa revelaron una situación ya observada por los docentes: la matemática es un dolor de cabeza para los alumnos.
A nivel general la asignatura ocupó el promedio más bajo entre las 4 evaluadas (ver infografía). Los adolescentes alcanzaron un puntaje superior en estudios sociales, seguido de lengua y literatura y ciencias naturales.
Janet Valdiviezo, docente de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemática de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), considera que a nivel de ciencias duras, como física, química y matemática, los docentes no logran llegar de manera eficiente a sus estudiantes.
Esto es preocupante puesto que el ENES (Examen Nacional de Educación Superior) mide precisamente el razonamiento abstracto y matemático. Esta aptitud es clave para cursar carreras pertinentes con el cambio de la matriz productiva, como ingenierías, robótica o de ciencias exactas.
“¿Qué es lo que sucede cuando el estudiante ve la resolución de un problema que se puede hacer en 5 líneas, pero se lleva 2 carillas? Lo asusta y no entiende. Los profesores tienen que buscar la manera más eficiente para llegar al estudiante y motivarlo; deberían aterrizarlo con procesos mucho más concretos”, según Valdiviezo.
En base a la prueba Ser Bachiller se determinó que el 55% de los estudiantes plantea el sistema y determina la solución de un problema matemático que incluya 2 ecuaciones lineales. Además, el 52% reconoce alguna de las propiedades de una tabla de valores, gráfico o ecuación que represente a una función cuadrática; mientras que un 50% calcula las restricciones de un problema sobre programación lineal.
Valdiviezo, quien también es la coordinadora a nivel nacional de los concursos de matemática, señala que cada vez es más crítica la situación de los estudiantes que llegan a los cursos de nivelación en las universidades. Los vacíos de conocimientos se notan a nivel algebraico, ya que tienen dificultades para factorizar y realizar funciones logarítmicas o exponenciales. También se les dificulta realizar ecuaciones trigonométricas.
En los primeros cursos hay un alto índice de reprobación en asignaturas como Cálculo Diferencial, en donde se utilizan muchas funciones y el álgebra. “Eso es un problema netamente de colegio, pero más a nivel básico, justamente el nivel elemental que deben utilizar para simplificar expresiones, eso es en lo que más se equivocan”.
El exrector del colegio Ismael Pérez Pazmiño, Carlos Carrasco, también coincide que una mejoría en el nivel de matemática depende mucho del profesor. Hay docentes a quienes les gusta preparar clases de una manera más dinámica y otros que van a un ritmo que aburre.
Por eso advierte que las personas prefieren carreras humanísticas o administrativas. “Cómo se va a inclinar por las matemáticas si no aprendió bien en el colegio y en la escuela”, dice.
Valdiviezo añade que este fenómeno no es nuevo en el mundo, cada vez las universidades tienen menos estudiantes que quieran estudiar carreras del área técnica.
Recomienda que los profesores de nivel medio se preparen no solo en el aspecto pedagógico sino en la parte de conocimiento.
Sobre este punto elMinisterio de Educación anunció nuevos cursos de actualización para que los docentes dominen la matemática y sepan cómo enseñarla.