Publicidad

Ecuador, 04 de Octubre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

La lagartija de cabeza verde es el nuevo hallazgo en Ecuador

La lagartija de cabeza verde es el nuevo hallazgo en Ecuador
02 de junio de 2014 - 00:00

Lo que inició como un estudio de la evolución del género Alopoglossus (lagartija) resultó ser el descubrimiento de una nueva especie bautizada como Alopoglossus viridiceps por la coloración verde de la cabeza, diferente a las otras siete clases de este género que existen en Sudamérica. Seis de ellas están en Ecuador.

Todo comenzó hace casi dos años, cuando Simón Lobos, estudiante de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), preparaba su tesis de grado y como parte de ello visitó la reserva Santa Lucía, al noroccidente de Pichincha.

En una de las visitas de campo a la reserva junto a Omar Torres, director del Museo de Zoología de la PUCE,identificaron la nueva especie. Para confirmar las sospechas se realizaron los análisis, entre ellos la anfilogenia (árbol genealógico).

“Lo que hicimos es tomar tres especímenes y de ellos tomamos los tejidos para hacer un estudio. Con los resultados preliminares que se obtuvieron constatamos que se trataba de dos linajes de una especie distinta”, contó Lobos.

Después, los dos investigadores  profundizaron el trabajo de campo en la reserva para la búsqueda de más individuos de la nueva especie y con base en datos morfológicos y genéticos determinaron que Alopoglossus viridiceps era efectivamente una variedad endémica de la  parroquia de Nanegalito, al noroccidente de la provincia de Pichincha.

Se hizo un estudio al ADN (ácido desoxirribonucleico) y con ese procedimiento se identificó la nueva especie de lagartija.

“La diversidad oculta o diversidad críptica se refiere a que hay un grupo de especies con amplia distribución, donde los individuos son muy similares externamente. Parecen todos iguales, pero al realizar estudios del ADN, se identifica que evolutivamente presentan linajes distintos”, señaló Torres.

Según Lobos, esta especie ya había sido recolectada en 2011, pero estaba incorrectamente clasificada. Fue el curador Mario Yánez quien se dio cuenta de esto y alertó a los investigadores. Para que el descubrimiento sea reconocido, necesitaron publicar el trabajo en una revista especializada. Lo hicieron de forma oficial el 21 de mayo de este año, en la revista científica Zookeys.

El valor ambiental

Los biólogos autores del descubrimiento indicaron que el valor fundamental de este hallazgo está relacionado a la ratificación de que Ecuador es un país megadiverso. Está entre los 10 mayores del mundo en cuanto a variedad reptil.

“Con esto se confirma la megadiversidad existente, pero también nos sirve para paulatinamente determinar qué es lo que realmente tenemos y así poder protegerlo. Además, el hecho de que se encuentre una especie tan cerca de Quito (a 45 minutos) debe alertarnos para proteger y conservar esa reserva porque la diversidad que existe aquí no está en otros lados”, acotó Lobos.

El bosque nublado caracteriza a la reserva de Santa Catalina, que  está ubicada a una altitud que va de los 1.200 a 2.000 msnm.

“Si queremos estudiar la ecología de un bosque, necesitamos saber con qué especies animales y vegetales se está trabajando para determinar el rol de cada una de ellas en el sistema y establecer teorías de cómo funciona el ciclo”, manifestó el investigador.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media