A 48 horas de la llegada del Papa Francisco (Jorge Mario Bergoglio) en Ecuador hay gran expectativa sobre el impacto que causará su mensaje, dado que el 80% de ecuatorianos se considera católico, cifra que ha disminuido en 14 puntos porcentuales desde la visita de Juan Pablo II hace 30 años, según datos comparativos del INEC.

La disminución del catolicismo no es una realidad solo del Ecuador sino de toda América Latina (ver gráfico).

Según especialistas consultados, los motivos del ‘desencantamiento’ hacia la Iglesia Católica son los escándalos que algunos de sus miembros han protagonizado en casos relacionados con la pedofilia y la corrupción.

La Iglesia ha dado la imagen de ser una institución acumuladora de capital, sin visión social y alejada de los valores cristianos.

Este análisis es corroborado por el estudio ‘Religión en América Latina: Cambio generalizado en una región históricamente católica’, realizado por el centro estadounidense de investigaciones PEW (en inglés Pew Research Center), publicado el 13 de noviembre pasado.

El estudio presenta que en los 19 países consultados la Iglesia católica ha sufrido pérdidas debido a que muchos latinoamericanos han decidido unirse a organizaciones evangélicas protestantes o que simplemente rechazan a la institución jerárquica de la Iglesia.

En Nicaragua, 1 de cada 4 ya no son católicos; en Brasil, 1 de cada 5; y en Venezuela, 1 de cada 7. El 69% de adultos en la región se identifica como católico, en comparación al 90% en el siglo XX.

Entre las razones que dieron los excatólicos consultados sobre su conversión a protestantes mencionaron la necesidad de una conexión personal con Dios o una organización que ayudara más a sus miembros.

El representante provincial de los jesuitas en Ecuador, padre Gilberto Freire, manifestó a El TELÉGRAFO que la disminución del catolicismo en parte se debe a las dinámicas del mundo actual que no permiten profundizar, sobre todo a la juventud, que “se interesa en vivir el momento presente y ha dejado de lado el compromiso duradero”.

La hermana Lourdes Alonso admite que hace algunos años el modelo eclesiástico se ha alejado de las cuestiones humanas y se ha vuelto más vertical.

“La zanja de las preocupaciones de nuestros pueblos y la de nuestra Iglesia se ha ido ensanchando. Por ello, las actitudes, palabras y gestos del papa Francisco anuncian una eclesiología de comunión, intercambio y discernimiento”, expresó Alonso.

Esto contrastaría con una actitud tradicionalmente pasiva de la Iglesia, entonces, ¿Francisco representaría una novedad? ¿Cuál será su papel?

“No es un teólogo, es un pastor”

La percepción de la hermana Alonso sobre el Papa es que es un pastor. Así lo mencionó durante su exposición dentro del ciclo de conferencias por la visita de Francisco al Ecuador, realizada en la Universidad Católica, entre el 24 y 26 de junio pasado, en Quito.

“El papa Francisco no quiere proponernos una nueva teología, y mucho menos una Iglesia nueva, sino que quiere darnos una orientación plenamente evangélica”, manifestó Alonso. Considera que se ha configurado un nuevo estilo e imagen del organismo eclesiástico.

En este sentido, la religiosa determinó que la misión del Sumo Pontífice es cristocéntrica e invita a predicar el Evangelio a través de la ternura y el amor. Además de promover una orden misionera.

Esta misión evangelizadora no tiene una intención proselitista o una “campaña para hacer número”, sino que constituye una solución creativa de acercarse a las personas, más humana.

En esto coinciden el padre Freire, el sacerdote y sociólogo belga Francois Houtart y el presidente del Fondo Ecuatoriano Populorum Progressio (FEPP), José Tonello.

Los expertos consideran que el reto es iniciar una transformación de la Iglesia desde adentro: su cultura y estructura, para responder a las necesidades actuales de la sociedad.

Tonello advierte los grandes obstáculos que Bergoglio podría tener: “Hay poderes políticos y económicos muy difíciles de romper y vencer. Vemos algo de eso también aquí, muy cerca de nosotros”.

Entonces, ¿cómo será recibido el mensaje de Francisco en la Iglesia del Ecuador? En la opinión de Houtart, Francisco no es un Papa de la Teología de la Liberación, pero sí predica una doctrina social radical que va a ser difícil conciliar en una Iglesia local conservadora.

El padre Freire afirma que la institución está encaminada a trabajar horizontalmente y que el mensaje del Santo Padre debe ser bien acogido: “Es verdad que hay que dar pasos muy fuertes todavía. Pero la Iglesia jerárquica, los religiosos y religiosas estamos invitados a vivir con mayor autenticidad”. (I)

Visita altera el tránsito vehicular y aéreo en Quito

La circulación vehicular en Quito y las operaciones en el aeropuerto sufrirán alteraciones durante la visita del Papa.

Mañana sábado, por ejemplo, desde las 06:00, hasta las 10:00 del 8 julio, se cerrará la circulación vehicular en las calles Colón, 12 de Octubre, Humboldt, Whimper y Diego de Almagro, aledaño a la sede de la Nunciatura. Solo se permitirá circular, con salvoconducto, a los vecinos de la zona.

También el sábado, desde las 20:00, iniciará un cierre al tránsito vehicular en el Centro Histórico. A los moradores se les permitirá la circulación con salvoconductos.

El domingo, de 14:00 a 16:00, se cerrarán las operaciones del aeropuerto para garantizar el arribo y movilización del Papa.

Por ello, de 12:00 a 17:00 se cerrará la circulación en la Ruta Viva e Interoceánica. Ese mismo día habrá puntos de control al ingreso y salida en las calles céntricas: Guayaquil, Rocafuerte, Olmedo, Manabí, Venezuela, Montúfar y Rocafuerte, y a la Plaza Grande y Plaza San Francisco.

Los vehículos particulares podrán circular por las avenidas Occidental, Ambato, Montúfar y Manabí. El transporte público municipal atenderá con normalidad.

El Pico y Placa regirá todo el día así: lunes, dígitos impares, y martes, números pares. (I)